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Va a pasar en más de ochenta lugares a la vez, empezando por la Plaza del Congreso. El miércoles por la tarde, en Argentina va a tener lugar la demostración más multitudinaria de que la violencia contra las mujeres importa. La concentración “Ni una menos” volverá visible cómo la reacción contra la violencia machista es un tema social que se ganó un lugar central en la agenda pública, pero también en la política. El primero de esos actos, que comenzará alrededor de las 17 en la Plaza del Congreso, tendrá una fuerte carga emotiva porque estarán allí sobrevivientes y familiares de víctimas que adhirieron a la convocatoria. También será una prueba de compromiso: la dibujante Maitena, el actor Juan Minujín y la actriz Erica Rivas leerán un documento que sigue el espíritu del reclamo de cinco puntos que ya han firmado algunos políticos y funcionarios. Además de autoconvocadas y autoconvocados, de partidos políticos, agrupaciones sindicales, y centros de estudiantes universitarios y secundarios, entre otros, estarán presentes las organizaciones del movimiento de mujeres.

La convocatoria es alta, como detalla el comunicado de la Comisión organizadora de Ni una menos: “Quienes quieran ir por su cuenta, con su familia, con amigos y amigas, con compañeras y compañeros”, también “artistas, organizaciones sociales, el movimiento de mujeres, estudiantes, docentes, universidades, a los y las adolescentes, a trabajadores, a militantes de géneros, a figuras públicas, a gremios, a asociaciones civiles y a todos los partidos políticos”. “Que cada quien concurra desde sus propias identidades, con sus propias consignas, con sus banderas o sin ellas, como más les guste, pero siempre en un clima de respeto y de unidad en la diversidad”, en lo que con el correr de las semanas se convirtió en “una causa de alcance federal”.

Hasta ayer, eran más de ochenta las convocatorias paralelas, en la mayoría de los casos pautadas a la misma hora que en la Ciudad de Buenos Aires (la información es enviada por los organizadores a [email protected], lista se va actualizando en las cuentas perfil de Twitter, @niunamenos, y de Facebook, Ni una menos). En todos los casos, fueron organizadas por iniciativa de personas, agrupaciones, espacios políticos y hasta institucionales, de cada lugar. No hay provincia sin al menos una cita pública con la consigna Ni Una Menos; en algunas, como Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Neuquén o Santa Cruz, hay más de (a veces, muchos más) los lugares de encuentro son más de cinco, y dan cita hasta en pequeños pueblos. En algunas de esas localidades, durante los primeros días de divulgación del encuentro en Plaza Congreso, grupos de mujeres habían anunciado su intención de viajar hasta la Ciudad de Buenos Aires. Pero con el correr de los días desistieron: en lugar de trasladarse, resolvieron convocar ellas mismas en su lugar. Pasó, por ejemplo, con las cordobesas del grupo Mujeres en Acción, de Corral de Bustos.

En otros lugares, la organización autoconvocada llegó a articular diferentes espacios y acciones. En provincia de Buenos Aires, alumnos y docentes de la carrera de Educación, de la Universidad Nacional de Luján (cuya Asociación Docente adhirió a Ni una menos), coordinaron con docentes de distintas escuelas. El miércoles se encontrarán en la Escuela Normal para ir todos juntos hasta el lugar de la concentración, la plaza Colón. Pero las actividades ya comenzaron: el sábado pasado, por caso, en el Instituto de Formación Docente Nº 141, las alumnas, que se están formando como futuras maestras, comenzaron jornadas de reflexión sobre violencia machista, historia de las mujeres, derechos. La perspectiva de movilizarse el 3 de junio, la sensibilización sobre los femicidios, alentó a que el tema ingresara directamente, en los hechos, en la currícula. Una de las docentes que forma maestras contó a este diario: “Las estudiantes son, en su mayoría, mujeres de entre 18 y 25 años; muchas no viven en Luján, viajan especialmente para estudiar”. En Uruguay, distintos colectivos llamaron a concentrarse el miércoles en Montevideo y en Maldonado; en Chile, sucedió lo mismo, con cita en Santiago de Chile.

Entre la noticia del femicidio de la joven santafesina Chiara Páez, que trascendió el 11 de mayo, y última hora de ayer, las adhesiones institucionales a la convocatoria superaron largamente el centenar. Las expresiones de voluntades personales de anónimos, sumándose, convocando con sus propias fotos, dibujos, mensajes, resultan incontables. Los apoyos de personajes públicos de la academia, los organismos de derechos humanos, el espectáculo, el deporte, el periodismo también superaron –por mucho– las cien. El espectro es plural y diverso, como los públicos a los que interpelan.

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