EL PAíS
Postales bolivianas
- La diputada Alicia Castro paseaba por el Tango su entusiasmo chavista con tal fervor que dijo: “En el referéndum se pondrá en juego el proyecto de soberanía política, independencia económica y justicia social”. Un cronista acotó: “Entonces Chávez es Perón”. “No sé si Perón o Bolívar –contestó Castro–, lo que está en juego es el proyecto de independencia y de no privatización de los recursos energéticos del país.” Una convicción militante, la de la dirigente de Frente para el Cambio.
- Impecable, como siempre, Cristina Fernández de Kirchner regaló sonrisas a diestra y siniestra apenas aterrizó en Tarija. Nadie sabe cuándo logró cambiarse en el trayecto del aeropuerto al hotel Los Parrales, pero se las ingenió para reaparecer espléndida con un vestido color chocolate, adecuado para los 30 grados y sentarse junto a la primera dama de Bolivia, Elvira Salinas de Mesa. Sólo alteró la charla en el lobby para atender a la TV boliviana y defender a su esposo. “Somos militantes de muchos años. El es un hombre de muchas convicciones, no tiene una doble actuación, sino una sola forma de ser y esto es lo que lo reconcilia con la sociedad.”
- A bordo del Tango, Ginés González García aún masticaba bronca por la ocupación del Hospital Posadas que anteayer lideró el piquetero Raúl Castells. “Hasta en las guerras se respetan los hospitales”, dijo luego de describir los trastornos provocados por la pérdida de los turnos en el único hospital que depende del Ministerio de Salud de la Nación.