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Los beneficiarios del Plan Jefas y Jefes de Hogar serán bancarizados en su totalidad en los próximos cinco meses. Así lo aseguró la secretaria de Trabajo, Noemí Rial, durante una visita a la Cámara de Diputados. La bancarización se inició en junio con una prueba piloto y hoy alcanza a 365 mil desocupados, es decir a poco más del 20 por ciento del padrón.
La tarjeta permite a los desocupados extraer de los cajeros automáticos los 150 pesos del subsidio en efectivo o usar la tarjeta para hacer compras recuperando el IVA en su totalidad. El Estado paga su reintegro depositando cada mes, junto al del plan, la devolución del IVA del mes anterior. Sin embargo, hasta ahora el mecanismo no es demasiado utilizado. Según los datos del ministerio, una amplísima mayoría de beneficiarios (82 de cada cien) la usa para retirar todo el efectivo del banco, mientras que sólo 18 de cada cien la utilizan para hacer compras.
Rial concurrió al Congreso acompañada por el subsecretario José Horacio Ordeix para exponer ante la Comisión de Presupuesto y Hacienda sobre el destino de diversas partidas del Presupuesto 2005.
Los funcionarios dieron a conocer otros detalles de la marcha del Jefas y Jefes de Hogar. Con un millón ochocientos mil beneficiarios a comienzos del año, el programa tiene hoy doscientos mil planes menos, reducciones que Ordeix explicó como “depuraciones del padrón”. Por ese mismo mecanismo en septiembre se dieron de baja 57 mil planes y en lo que va de este mes se cancelaron 12 mil. El presupuesto para los subsidios está así en la actualidad en 244 millones cuatrocientos mil pesos al mes.
El plástico no convertirá a los beneficiarios en clientes del banco, ya que no se abren a su nombre cajas de ahorro ni cuentas corrientes y sólo funciona como un mecanismo de débito. Las tarjetas son emitidas por el Banco Nación.
El propósito de bancarizar de aquí a marzo del 2005 a quienes aún cobran por planillas se cumplirá por etapas. Si se quiere cumplir con tal plazo, el proceso deberá darse de forma acelerada, ya que el número de personas en esa situación supera el millón doscientos mil.