EL PAíS › ARSLANIAN EN LA ROSADA
Un posible candidato
Por Martín Piqué
Su apellido sonó anoche como el santo y seña de un grupo reducidísimo de entendidos. Quienes mencionaban a León Arslanian, reconocido miembro de la Cámara Federal que enjuició a las juntas, sugerían que el jurista –actual ministro de Seguridad bonaerense– podía ser el acompañante de Cristina Kirchner como segundo candidato a senador del Frente para la Victoria. Los rumores se basaban en ciertos hechos de la última semana. El miércoles pasado, Arslanian visitó la Casa Rosada y se entrevistó con el presidente Néstor Kirchner. La reunión se realizó en el mayor de los sigilos y no trascendió a la prensa. Un testigo del encuentro, que se hallaba allí para hablar con el Presidente, confirmó la reunión a Página/12. Otro hombre del Gobierno aseguró a este diario que la figura de Arslanian es coherente con “el rumbo” que el matrimonio presidencial quiere darle a sus candidaturas.
En los últimos días comenzó a circular la clásica danza de nombres que precede al anuncio de candidaturas. La intriga se concentraba, sobre todo, en el apellido que secundará a Cristina Kirchner como candidato a senador. Hasta hace poco, el ministro de Defensa, José Pampuro, era el más nombrado entre funcionarios nacionales y miembros de la gobernación provincial. Sus chances parecían acrecentarse tras la ruptura (aparentemente definitiva) entre Kirchner y Eduardo Duhalde: el bonaerense pretendía que José María Díaz Bancalari ocupara ese lugar. Sin embargo, en los últimos días, a medida que el distanciamiento con Duhalde se acercaba al punto de no retorno, en el Gobierno comenzaron a decir que para acompañar a la primera dama querían una figura “de prestigio” alejada de la política y vinculada a los derechos humanos y a la cultura.
El primer nombre que surgió, naturalmente, fue el de la titular de Abuelas, Estela Carlotto. Vecina de La Plata, Carlotto tiene muy buena relación con el matrimonio presidencial y con el gobernador Felipe Solá. Ha elogiado algunas medidas del Gobierno, especialmente su política de derechos humanos, y dos de sus hijos están muy cerca de la administración de Solá: Remo Carlotto es secretario de Derechos Humanos de la gobernación y su hermano Guido iba a ser candidato a diputado provincial en la octava sección electoral (La Plata) por el Frente para la Victoria, aunque finalmente su puesto quedó en manos de otro dirigente.
Por todo esto, se pensaba que la candidata a acompañar a Cristina podía ser la titular de Abuelas. Ayer, el diario El Día de La Plata dio cuenta de esa posibilidad. Horas más tarde, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, aseguró en una entrevista que Carlotto no sería la acompañante de Cristina Kirchner. Fernández dijo que en la lista de senadores del Frente para la Victoria irán “un hombre y una mujer”, aunque aclaró que en ese momento desconocía quién sería el elegido. Su respuesta fue coherente con la información que dejó trascender el propio Gobierno. La discusión sobre el nombre del segundo candidato a senador, al igual que la lista de diputados nacionales, se concentró en un lugar muy exclusivo y con unos pocos interlocutores privilegiados: la quinta de Olivos.
Como en todas las decisiones importantes, el Presidente convocó en su residencia a su círculo de confianza. Al mediodía almorzó con el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y sus operadores políticos Dante Dóvena, José Salvini y Carlos “Cuto” Moreno, el apoderado legal del kirchnerismo. Después de dormir la siesta, Kirchner se encerró en otra nueva reunión con el jefe de Gabinete. Allí hablaron de la lista de diputados y del perfil que buscan para el acompañante de Cristina Kirchner. “Están buscando a alguien que no sea muy partidario”, resumió un dirigente porteño que había hablado con Alberto Fernández. La figura de Arslanian sonaba coherente con esa búsqueda. Un allegado a Kirchner que estuvo en Olivos lo reconoció ante Página/12, aunque con la ambigüedad del caso: “Puede ser”.
Sin embargo, con Kirchner nunca se sabe. En 2003, por ejemplo, la mayoría descontaba que el candidato a vicepresidente sería Roberto Lavagna. El santacruceño, enojado por esas especulaciones, sorprendió ubicando a Daniel Scioli en ese puesto. Lo que está confirmado es que la semana pasada Arslanian estuvo a solas con el Presidente. También es seguro que en esa reunión –alejada de las cámaras–, el actual ministro de Seguridad recibió un ofrecimiento. Aunque la oferta podría ser otra: en el kirchnerismo hay quienes piensan que Arslanian podría ser el nuevo ministro de Justicia en reemplazo del santafesino Horacio Rosatti. Otra posibilidad es que la propuesta que haya escuchado el ex camarista tenga que ver con la Corte Suprema, donde próximamente se abrirán dos vacantes por la renuncia de Augusto Belluscio y la casi segura destitución de Antonio Boggiano.