Martes, 30 de mayo de 2006 | Hoy
EL PAíS › LA JUEZA SERVINI DE CUBRIA AVALO LA IMPUGNACION DEL REPRESOR EN DIPUTADOS
El fiscal y la jueza convalidaron la impugnación del represor Luis Abelardo Patti por falta de idoneidad moral para integrar la Cámara de Diputados a partir de su actuación durante la dictadura. En la sesión de mañana deberá asumir quien lo sigue en la lista del Paufe, Dante Camaño, cuñado de Luis Barrionuevo.
Por Adriana Meyer
El represor con aspiraciones a diputado Luis Abelardo Patti recibió otro revés, esta vez de la Justicia. La jueza María Servini de Cubría rechazó el pedido del ex subcomisario para que se impidiera la asunción de su sucesor, Dante Camaño, y para que se declarara la inconstitucionalidad de la decisión del Congreso que lo impugnó por falta de idoneidad moral. Horas antes, el fiscal Jorge Di Lello había requerido a la magistrada con competencia electoral que no hiciera lugar al recurso de amparo pedido por Patti. Las autoridades de la Cámara de Diputados ya tenían pensado ir para adelante con la jura de Camaño, prevista para la sesión de mañana, en el entendimiento de que está obrando como un poder independiente con facultades para concretar la ocupación de la banca que dejó libre el represor. El oficialismo sabía que debía concretar el recambio cuanto antes porque el conflicto entre poderes sería inminente. Pero ahora Servini despejó el panorama al avalar lo realizado por el Congreso.
Con el patrocinio del abogado Gregorio Badeni, la semana pasada Patti se presentó en Tribunales con la intención de frenar un proceso que para el Congreso parece irreversible. Según Badeni, la Cámara baja “no cumplió con los preceptos constitucionales ni con el Pacto de San José de Costa Rica que establece que nadie puede ser privado de sus derechos políticos si no media una condena penal, algo que no existe en el caso de Patti”. Este torturador confeso sostuvo que el único órgano habilitado para juzgar la idoneidad de un candidato es el “electoral”, porque los diputados “no pueden autoproclamarse jueces”.
Di Lello rechazó las aspiraciones de Patti con el argumento de que “los actos propios de un poder del Estado se presumen legítimos si fueron dictados formalmente y en el marco de sus funciones”. Con este dictamen y una copia de la impugnación del represor, la jueza Servini de Cubría estuvo en condiciones de decidir. La magistrada se pronunció en el mismo sentido que Di Lello, es decir, a favor de la decisión de la Cámara y reconociéndole que tiene facultades para hacerlo. “Los 400 mil votos a los que (Patti) pretende dar carácter de propios no pueden adjudicarse en forma exclusiva a ninguno de los integrantes de la lista en particular, por aplicación del sistema electoral de lista completa”, remarcó Servini de Cubría. Según la jueza, esto es así porque “al no contemplar dicho sistema el método de sustituciones o tachas sólo puede concluirse que esa cantidad de votos ha sido obtenida por todos y cada uno de los integrantes de la mencionada lista”.
Esta decisión reafirma lo que ya estaba previsto: que la asunción del cuñado de Luis Barrionuevo se produzca mañana. Las autoridades administrativas de la Cámara tienen en su poder la constancia proveniente de la Justicia electoral que indica que el dirigente gastronómico es quien sigue en la lista del Paufe (Partido de Unidad Federalista), la agrupación pattista. Camaño había intentado jurar el martes, al final de la sesión que determinó el destino de Patti. Pero un sector del kirchnerismo tuvo rápidos reflejos y ordenó frenarlo ante la evidencia de que “empañaría” el logro de la impugnación. Sin embargo, no estaban tan equivocados quienes opinaron que Camaño debía asumir cuanto antes, en previsión de que estallara una controversia entre el Poder Legislativo y el Judicial. Aquella noche, el hermano de Graciela Camaño no había hecho los trámites formales y hasta anoche tampoco los había concretado: presentación de DNI y de sus huellas digitales. Pero puede hacerlo luego de la jura. “Estamos convencidos de la legitimidad del proceso” que culminó con la inhabilitación de Patti, reiteró una alta fuente del oficialismo en Diputados.
Con algunas semejanzas y ciertas diferencias con el caso Bussi, la situación de Patti seguirá su camino en la Justicia hasta llegar a la Corte, donde aún no fue resuelta la cuestión de fondo en el planteo del genocida tucumano. En aquel momento, la Cámara Electoral se mantuvo atada al criterio del Pacto de San José de Costa Rica, invocado por Badeni. Pero este nuevo escenario podría ampliar los criterios de los magistrados, sobre todo los del máximo tribunal. Un latente conflicto de poderes fue mencionado en la resolución de la jueza, que advirtió a la Cámara de Diputados que “prevea la posibilidad de que exista una sentencia favorable a las pretensiones” de Patti en otras instancias judiciales, tales como la Cámara Electoral y la Corte Suprema.
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