En vísperas del homenaje que la Iglesia en su conjunto le hará por primera vez hoy y mientras la Justicia avanza en la investigación del caso, la Conferencia Episcopal admitió que analiza la posibilidad de presentarse como querellante judicial en la causa por el asesinato del ex obispo de La Rioja Enrique Angelelli. “Se están haciendo las averiguaciones para ver si eso es posible”, precisó el vocero del Episcopado, Jorge Oesterheld, mientras que el arzobispo emérito de Resistencia Carmelo Giaquinta reveló que la jerarquía católica está indagando en “medios eclesiales” para colaborar en el esclarecimiento del crimen de Angelelli, del que se cumplen hoy treinta años.

Oesterheld reconoció que “está en estudio” si el Episcopado se presenta como querellante en la causa por la muerte de Angelelli al arribar al aeropuerto de La Rioja junto al titular del máximo órgano de conducción de la Iglesia, el cardenal Jorge Bergoglio. Ambos viajaron a esa provincia para participar hoy de la misa que se celebrará en la catedral de la capital riojana en homenaje a quien condujo esa diócesis hasta su asesinato en plena dictadura militar, el 4 de agosto de 1976.

El gobierno de La Rioja recordará a Angelelli con una peregrinación hasta el paraje denominado El Pastor, cerca de Punta de los Llanos, donde el obispo fue emboscado mientras conducía su camioneta. Allí hay una ermita en el lugar en que se encontró su cuerpo con un golpe en la cabeza.

“Se están haciendo las averiguaciones para ver si eso es posible”, explicó Oesterheld sobre la eventual presentación de la Conferencia Episcopal como querellante en la causa que investiga el crimen de Angelelli. El sacerdote aclaró, de todos modos, que la decisión al respecto no será inminente y remarcó que “independientemente de cómo haya muerto monseñor Angelelli, lo importante es cómo vivió y el testimonio que nos ha dejado a todos. Y mientras vivió y fue obispo de La Rioja, fue perseguido, padeció mucho por predicar el Evangelio y por implementar el Concilio Vaticano II”.

Osterheld dijo, de paso, que las relaciones entre la Iglesia y el gobierno nacional “son normales” y que la ausencia de Bergoglio en el homenaje a Angelelli que se realizó anteayer en la Casa Rosada se debió “a que la invitación llegó a último momento”. “Los obispos –argumentó– tienen agendas muy armadas y él quería venir a La Rioja a celebrar el aniversario.”

Giaquinta también rescató la figura de Angelelli, al incluirlo entre “los cristianos que murieron por el Evangelio”. Se trata del prelado al que el Episcopado le encargó un relevamiento en “medios eclesiales” en busca de datos que ayuden al esclarecimiento del crimen de Angelelli.

“Con dolor constato que en la Iglesia manejamos una documentación bastante magra. Que el tiempo transcurrido ofrece no pocas dificultades para cualquier investigación”, contó el arzobispo emérito de Resistencia a la agencia católica de noticias AICA. Aun así, consideró que “la Iglesia puede colaborar con la Justicia” en el caso del ex obispo riojano.

Después de años de parálisis, la causa judicial por la muerte de Angelelli volvió a tomar impulso hace un tiempo cuando el Estado nacional y La Rioja se presentaron como querellantes. La investigación está otra vez en marcha y ayer el fiscal federal del caso, Horacio Salman, tomó declaración testimonial a un ex médico legista y dos colaboradores de Angelelli. Enzo Herrera Páez, quien participó de la autopsia al ex obispo, ratificó que sus lesiones eran “propias de un accidente”. El ex sacerdote Arturo Pinto, quien viajaba con Angelelli el día de su muerte, reiteró que fue víctima de “un accidente provocado”. Lo mismo declaró quien fue su secretario privado, el ex cura Juan Aurelio ‘Alilo’ Ortiz.