A partir del 1° de marzo el piso salarial para los docentes de jornada simple pasará de 840 a 1040 pesos. Así lo anunció ayer el ministro de Educación, Daniel Filmus. Acompañado por el titular de la CTA, Hugo Yasky, y otros dirigentes de los gremios docentes nacionales, Filmus destacó que “este aumento es una recuperación concreta y real del salario y representa un incremento promedio de la masa salarial docente de un 15 por ciento”.

A pocos días de la presentación anual que Néstor Kirchner realizará frente a la Asamblea Legislativa, a semanas del comienzo del ciclo lectivo, a meses de la elección a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, en la que Filmus es el candidato del oficialismo, el ministro anunció el aumento del salario inicial después de reunirse con el Presidente.

El ministro destacó que “al momento de asumir fuimos con el Presidente a Entre Ríos a resolver el conflicto docente, porque no había clases debido a que no se pagaban los salarios, que eran en bonos y alcanzaban los 240 pesos. Con este incremento, acordado con los cuatro gremios docentes: Ctera, Sadop, UDA Y AMET, se multiplica por cuatro el salario de las provincias más pobres y por tres a nivel nacional”.

Un mes después de haber recibido la banda presidencial de manos de Eduardo Duhalde, Kirchner firmó con los gobernadores un acta en la que “se garantizaba un piso de 180 días de clase”. Para cumplir con este punto, el Gobierno se comprometía a adelantar fondos de la coparticipación cuando las provincias no pudieran cumplir con la obligación salarial. En el 2005, en su discurso frente a las cámaras parlamentarias, Kirchner anunció que “ningún docente cobrará menos de 700 pesos”. En el 2006, luego de reunirse con los gremios del sector, Filmus aseguró que el piso salarial sería de 840 pesos. Al presentar la medida, subrayó que “ningún docente estará bajo la línea de pobreza”. En esa ocasión, en representación de Ctera, Yasky había calificado la medida como “un hecho trascendente e histórico”. Un año más tarde, en el mismo lugar y con la misma escenografía, Yasky dijo que el anuncio es “un paso más para llevar a la educación al lugar que se merece”.

Además de Yasky, compartieron la rueda de prensa el secretario general de UDA, Norberto Cavana; el titular Sadop (Docentes Privados), Horacio Ghilini, y de los docentes técnicos de AMET, Jorge Dobal. Los gremialistas destacaron que la medida oficial “va a dar más dinamismo a las discusiones salariales para el sector”. En no pocas provincias integra el piso salarial una serie de sumas no remunerativas. En el 2006 la mayoría de los conflictos docentes reclamaban que esas sumas se incorporaran al salario básico, sobre el que se calcula el plus por antigüedad, se realizan los descuentos jubilatorios y se abona el salario familiar.

Filmus negó ayer que el aumento provoque un incremento en las cuotas de los colegios privados, ya que existe un compromiso firmado con las cámaras empresarias. Para que no queden dudas, destacó que “no hay ninguna posibilidad de aumento”. En diálogo con este diario, el ministro aseguró que “el aumento del piso salarial beneficia a un 70 por ciento de los docentes, ya que no sólo hay que contar a los que se inician en la carrera, sino también a una masa importante –sobre todo de docentes bonaerenses– que estaban debajo de esta remuneración”.