El apartamiento de tres jueces de la Cámara del Crimen de Corrientes resuelto por una Cámara de Apelaciones obligó a postergar sin fecha definitiva el juicio al que iba a ser sometido el ex gobernador y ex intendente de Corrientes Raúl Romero Feris por delitos cometidos contra el Estado. Por el momento, el ex caudillo podrá continuar con su actividad en la televisión por cable sin preocuparse por sus numerosos asuntos pendientes con la Justicia. E incluso con la esperanza de una posible prescripción de este caso.

La Cámara del Crimen número 2 debió apartarse de una causa en la que se investiga al ex funcionario y a la ex viceintendenta Lucía Ortega por la rendición de fondos destinados a construir un albergue para inundados en el predio del ex Regimiento Santa Catalina del Ejército con facturas apócrifas.

La resolución lleva el número 377 y tiene fecha del 5 de julio último, pero se conoció recién anoche y determinó la separación del tribunal de los camaristas María Elisa Morilla, Cynthia Teresita Godoy Prats y Eduardo Panseri al hacer lugar a una recusación presentada por Ortega.

La ex número dos de Tato Romero Feris planteó que los jueces que integraban la Cámara no estaban en condiciones de juzgarlos debido a que ya habían anticipado su opinión. Y precisó que lo hicieron al intervenir en la misma causa y rechazar las apelaciones presentadas en los autos de elevación a juicio, citando como jurisprudencia lo ocurrido en el conocido caso Fraticelli, en referencia al juez de Mercedes acusado junto a su esposa, de haber asesinado a su hija.

Los jueces subrogantes Juan José Cocchia, Gabriela Aroma de Sommer y Mario Alegre fueron los encargados de resolver la situación y los dos primeros votaron a favor de la recusación, mientras que Alegre, en disidencia, opinó que la presentación realizada estaba “fuera de término”.

Esos jueces eran los únicos en condiciones de intervenir en el caso, pues los demás camaristas también fueron recusados, al igual que los demás jueces de instrucción, por lo que no quedan jueces en esa jurisdicción que se encuentren en condiciones de llevar adelante el juicio que debió haber comenzado el 29 de julio último. Sólo queda la posibilidad de conformar una cámara integrada por los mismos jueces que intervinieron en la recusación, más un juez civil que deberá sortearse, según señalaron fuentes judiciales. Sin embargo esa alternativa fue considerada “inviable”, por lo que el juicio quedó sin fecha y con posibilidades de que el paso del tiempo permita que el delito quede sin ser juzgado por prescripción de la causa.

Sobre Raúl Romero Feris pesan tres condenas por delitos cometidos durante su última gestión como intendente de Corrientes y en esta causa se lo acusa de la rendición con facturas de empresas fantasmas de un fondo especial creado por la administración por su gestión para la realización de obras en las instalaciones del ex regimiento Santa Catalina. El gobierno municipal que sucedió al de Romero Feris detectó que las obras no sólo no fueron hechas sino que además los fondos fueron rendidos con facturas de empresas inexistentes.

Romero Feris estuvo poco más de tres años detenido en el Escuadrón 48 de la Gendarmería Nacional, entre 1999 y 2002, a disposición de la Justicia correntina en la que se tramitan más de medio centenar de causas en su contra, en su mayoría por hechos de corrupción durante su gestión como intendente entre 1997 y 1999, cuando fue destituido, y algunas de su período como gobernador, entre el ’93 y el ’97. En febrero la Corte Suprema ratificó una condena en su contra a siete años por administración fraudulenta, en otra causa.