Aníbal Ibarra, Gabriela Cerruti y Diego Kravetz cuestionaron la decisión del futuro jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, de designar al frente de su Agencia de Control Comunal a Federico Young, el ex juez que participó de actividades organizadas por la activista castrense Cecilia Pando para repudiar los procesos por violaciones a los derechos humanos. “Es una muestra más del profundo contenido ideológico de derecha de Macri, que no se detiene ni ante quienes defienden la dictadura militar”, opinó ante Página/12 el depuesto jefe de Gobierno.

“No me sorprende, pero es preocupante que bajo un discurso de despolitización quiere meternos lo peor de la política en forma subrepticia”, completó Ibarra. Young había dicho en el acto convocado por Pando que “entre los terroristas tenemos uno que llegó al máximo cargo”. Respecto del organismo que Macri pretende crear, Ibarra afirmó que “no obedece a un intento de mejora en la administración sino a que, después de su posición en Cromañón, quiere estar lo más despegado posible de cualquier hecho que ocurra en la ciudad”.

Por su parte, Diego Kravetz, presidente del bloque Frente para la Victoria en la Legislatura porteña, le reclamó públicamente a Macri que “dé marcha atrás con la designación de Federico Young”, quien, según publicó Página/12, impulsó un freno a los juicios a los represores. “Con el avance que realizó el país en materia de derechos humanos es inaceptable la designación de un funcionario que abiertamente respalda el terrorismo de Estado”, expresó Kravetz en referencia al seminario del que participó Young titulado “Igualdad ante la Ley, juicio y castigo a los terroristas de los ’70”. Por ese motivo el jefe del kirchnerismo en la Legislatura insistió en que Macri revea su decisión. “Se supone que se le concedió un rol en la comuna desconociendo esta información, por eso ahora que salió a la luz entendemos que la única decisión posible es impedir el nombramiento”, afirmó el legislador K. Por último, volvió a manifestar su intención de “garantizar la gobernabilidad en el distrito, sin entorpecer la gestión, pero limitando la posibilidad de cometer errores como el que representa la asunción de Young”.

La legisladora electa Gabriela Cerruti también se sumó a las críticas hacia Macri por su decisión de incorporar a “un representante de la dictadura” en la futura Agencia de Control Comunal porteña y consideró este nombramiento como “una bofetada a la sensibilidad de los ciudadanos”. Según Cerruti, el futuro jefe del Ejecutivo porteño está demostrando que “será un nuevo (Osvaldo) Cacciatore”, en alusión al intendente que gobernó la Capital Federal durante parte de la dictadura. La ex ministra del gobierno de Jorge Telerman expresó su preocupación por los nombres de los futuros funcionarios que integrarán el gabinete porteño, porque “representan a la dictadura y a empresas que hasta ayer fueron contratistas del gobierno de la ciudad”. Y agregó que el futuro mandatario porteño “está entregando a sus amigos empresarios el control del espacio público para hacer negocios y el control de la calle a un hombre cercano a la dictadura”.