“Vamos por otro 25 de mayo.” La frase se escuchó en Parque Norte cuando terminó el discurso de la Presidenta. Y salió de la boca de su esposo. ¿A qué se refería Néstor Kirchner? A la concentración en Plaza de Mayo que el kirchnerismo está preparando para el martes próximo. El primer anuncio lo hizo el locutor oficial del acto en Parque Norte. Ayer siguieron los preparativos. Hubo llamados telefónicos desde la Casa Rosada a los principales referentes de los sindicatos, municipios y organizaciones sociales. El mensaje, en todos los casos, fue el mismo: “Tenemos que juntar cien mil personas en la Plaza”. Desde el Gobierno aclararon que la movilización del martes se mantendría más allá de cuál sea el resultado de la negociación con los ruralistas. Anoche, al enterarse de que la primera reunión había fracasado, la convocatoria fue reforzada aún más. “Venimos el martes y también el fin de semana”, fue la consigna.

La referencia al 25 de mayo no es por la fecha patria, sino por el acto más concurrido que hizo el kirchnerismo en toda su historia. Fue el 25 de mayo de 2006, hace dos años. Aquella vez se concentraron en la Plaza de Mayo entre 80 y 120 mil personas, según las lecturas de los distintos medios. Ahora el deseo del Gobierno es repetir la misma convocatoria. En esta oportunidad la oradora será Cristina, no Néstor. Aunque ambos encabezarán el enorme palco que se montará sobre la calle Balcarce, como ya se hizo en la movilización de 2006. La escenografía se completará con pantallas gigantes y las cámaras con grúas móviles que son marca registrada del secretario de Medios, Enrique Albistur.

El acto está convocado para las 16, con la idea de que Cristina hable temprano y la desmovilización comience a plena luz del día. Para evitar incidentes, se pretende que las columnas de manifestantes abandonen el centro de la ciudad antes de que oscurezca. Desde el mediodía irán desfilando por el escenario artistas, actores y músicos que hablarán desde el micrófono y cantarán sus canciones. En la Secretaría de Medios trabajarán todo el fin de semana a contrarreloj para ajustar los detalles organizativos de esa parte del acto. En los últimos días la repartición de Albistur estuvo al servicio de uno de los objetivos del kirchnerismo: garantizar la ocupación de la Plaza de Mayo por militantes K.

La otra repartición del Gobierno que está trabajando en la organización del acto es la Secretaría General de la Presidencia. El equipo de colaboradores de Oscar Parrilli ya comenzó a contactar a los responsables de cada sector. Por la CGT los interlocutores fueron el secretario general, Hugo Moyano, y el titular de Obras Sanitarias, José Luis Lingeri. Moyano y Lingeri prometieron que el sindicalismo llevará al acto de Plaza de Mayo decenas de miles de trabajadores. “Estamos decididos a movilizar con todo. La presencia sindical va a ser muy importante”, adelantó a Página/12 el dirigente de Judiciales, Julio Piumato. La cúpula cegetista se reunirá el lunes a las 11 en el edificio de Azopardo para las cuestiones operativas.

Las columnas de la CGT ingresarán en la Plaza por Diagonal Sur y permanecerán a la derecha, entre la Pirámide de Mayo y los edificios de la calle Hipólito Yrigoyen. Como ese día no habrá paro ni cese de actividades, el martes se movilizarán los trabajadores que terminen sus turnos entre las 12 y las 14. Anoche, en declaraciones a un canal de noticias, el propio Moyano prometió que la concentración será una señal de fortaleza muy grande. “El martes en la Plaza de Mayo habrá un acto multitudinario. Después de lo ocurrido en los últimos días, y cuando algunos pequeños sectores insultaron a la Presidenta, los trabajadores resolvimos mostrar este respaldo masivo”, afirmó el camionero.

Además de la CGT, también movilizarán al acto los movimientos sociales kirchneristas. Las organizaciones del sector ya adquirieron bastante gimnasia en la movilización: en los últimos días fueron el único espacio del oficialismo que salió a la calle para expresar su adhesión a las políticas del Gobierno, en este caso con las retenciones. Las organizaciones sociales se concentrarán a la izquierda de la Plaza, ocupando Rivadavia, sobre la Catedral y el Banco Nación. Todas las agrupaciones del sector participarán del acto. Algunas lo harán en columnas unificadas. Desde el Movimiento Evita anuncian una sorpresa: la columna estaría encabezada por pequeños productores agropecuarios alineados con la agrupación.

El centro de la Plaza estará reservado a intendentes y gobernadores. Los intendentes que integran el bloque justicialista de la Federación Argentina de Municipios ya se reunieron para preparar la participación de sus militantes. Fue el jueves en la sede de la FAM. “Vamos a marcar un respaldo contundente a las políticas del gobierno nacional”, dijo a Página/12 el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra.