Desde diferentes posiciones los acopiadores de granos y exportadores de carne se quejan por la falta de acuerdo entre el Gobierno y el campo. Ambos sostienen que el conflicto perjudica el desarrollo de su actividad Los frigoríficos, que restablecieron sus envíos al exterior con la reapertura del registro de exportaciones, argumentan que el lockout perjudica a sus empresas porque impide el trabajo normal reduciendo la producción y paralizando la actividad en planta. Por su parte, los acopiadores de granos apuntan a la movilidad de las retenciones que

La Federación de Acopiadores de Granos lamentó que el Gobierno y las entidades agropecuarias no hayan podido alcanzar un acuerdo en el tema de las retenciones, que hubiese permitido “normalizar la producción y comercialización” del sector. En un comunicado, la entidad planteó la necesidad de “evitar los efectos no deseados” de las retenciones móviles, tanto sobre la producción como respecto al funcionamiento de la comercialización, además de considerar a los mercados de futuro una “herramienta imprescindible”.

Por su parte, el presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas ABC, Mario Ravetino, afirmó que el lockout del agro “perjudica al sector de la carne” y dijo que “se puede llegar a resolver si se postergan los intereses particulares”. Respecto del acuerdo alcanzado entre el Gobierno y el sector de la carne, el titular del Consorcio de Exportadores de Carnes ABC evaluó que “es un muy buen acuerdo porque da un marco previsible para todo el año y a la vez incrementa las exportaciones en 50.000 toneladas anuales que se suman a las 500.000 que ya se exportan hoy”. Resaltó que el acuerdo “libera las exportaciones de las vacas de categorías utilizadas para termo procesados, que el mercado local no consume”. En esa línea, aseguró asimismo que el acuerdo “tiene además medidas de mediano y largo plazo propias de una política de ganados y carnes”.