El juez en lo Penal Económico Daniel Petrone pidió en la causa de la valija que se haga una pericia contable en Venezuela para determinar si en la petrolera estatal Pdvsa hubo un faltante de dinero que haga pensar que eran los 800 mil dólares que traía Guido Alejandro Antonini Wilson. En una resolución, además, rechazó un pedido de la fiscal María Luz Rivas Diez para ampliar la indagatoria que prestó en forma espontánea la semana pasada el ex funcionario kirchnerista Claudio Uberti. El texto aclara que no se descarta citarlo más adelante.

El pedido para analizar las cuentas de Pdvsa había sido impulsado hace tiempo por Rivas Diez. Petrone dispuso enviar un exhorto a las autoridades venezolanas, que a su vez deberían derivarlo al Poder Judicial donde se supone que tramita una investigación por la salida ilegal de los 800 mil dólares. Hasta ahora, Venezuela no ha respondido los pedidos de colaboración que la Justicia argentina le formuló. El ex vicepresidente de Pdvsa, Diego Uzcátegui Matheus, y su hijo Daniel Uzcátegui Specht, están imputados en Argentina como partícipes de lavado de dinero, faltaron a cuatro indagatorias y tienen pedido de captura, pero aún no aparecen.

Uzcátegui padre está señalado como quien gestionó que Uberti, que había viajado a Caracas por acuerdos energéticos, llevara en el vuelo privado de regreso a Buenos Aires (alquilado por Enarsa), a su hijo, a Antonini y a tres ejecutivos de Pdvsa. Al llegar se detectó la valija con los 800 mil dólares y Antonini, según la mayoría de los testigos, dijo que le pertenecía. Uberti, según pruebas de la causa, habló por teléfono a la Quinta de Olivos cuando estaba terminando el conteo de la plata y fue hasta allí a reunirse con el ex presidente Néstor Kirchner.

La semana pasada, Uberti, ex titular del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi), se presentó en el juzgado y pidió que lo indaguen. Allí reconoció su reunión en Olivos pero dijo que no habló del episodio de la valija, algo que en cambio admitió que hizo con el ministro de Planificación, Julio De Vido, dos días después. La fiscal Rivas Diez pidió una ampliación de esa declaración, que tuvo la forma de una indagatoria, pero el juez Petrone le dijo que era improcedente porque había sido por voluntad del imputado.