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La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) elogió “la lucha contra la impunidad del pasado” del gobierno de Néstor Kirchner, pero pidió que se evite “la criminalización de la protesta social”. Una delegación de la FIDH –integrada por su secretario general, Claude Katz; el economista francés Pierre Salama y el jurista chileno Federico Aguirre– estuvo de visita en el país y ayer dio una conferencia de prensa donde expuso las conclusiones que sacó luego de entrevistarse con los ministros de Justicia, Gustavo Beliz, y de Trabajo, Carlos Tomada; el vicecanciller Jorge Taiana, con varios jueces federales y organismos de derechos humanos. “La política de Kirchner de romper con la cultura de la impunidad levantó una esperanza histórica para el pueblo argentino y para todo el mundo. Le pedimos que no nos desilusione”, aseguró Katz.