EL PAíS › KIRCHNER VIAJO A CHUBUT Y HABLO BIEN DE DAS NEVES Y LIZURUME
El Presidente viajó en avión de línea
Desde Puerto Madryn
Esta vez no fue en el Tango 01. El presidente Néstor Kirchner viajó a Chubut en un vuelo de la empresa Southern Winds. Las secuelas de la denuncia sobre corrupción (ver nota principal) tuvieron como consecuencia la falta de pilotos para timonear el avión presidencial.
Kirchner arribó pasado el mediodía al aeropuerto El Tehuelche junto con los ministros del Interior, Aníbal Fernández, y de Planificación Federal, Julio De Vido. Cada paso que dio Kirchner en su periplo patagónico estuvo teñido por el clima político que se vive en el tiempo de descuento previo a las elecciones del domingo 9 de noviembre, en las que el actual gobernador, el radical José Luis Lizurume, busca su reelección, y para las que aparece como el más favorecido por las encuestas, para mal del actual titular de la Dirección Nacional de Aduanas, Mario Das Neves.
Kirchner no se privó de sacudir el escenario nacional con sus fuertes declaraciones sobre la conducción política de la Policía Bonaerense (ver págs. 2 y 3). El Presidente también advirtió que la actual postura de la Argentina ante los acreedores extranjeros respecto de la deuda “es nuestra posición definitiva”, y volvió a la carga contra las empresa privatizadas. “Nos cortan un poquito acá, otro poquito allá, para tratar de poner histérico a todo el mundo y que se diga ‘que nos cobren 100, que nos cobren 500’” o “nos dicen que va a faltar agua y salimos a comprar 20 botellas de agua juntas. Terminemos con eso y tengamos, de una vez por todas, la firmeza de defender nuestros intereses”, pidió el Presidente en conferencia de prensa sobre el final del día. También disparó contra “los que nos asustan con el caos y nos viven quebrando, y después se lo llevan todo”. “Basta –exhortó– que no nos corran más.”
Respecto de las elecciones locales, Kirchner no apeló a la transversalidad pero sí a algo bastante parecido a la ecuanimidad. “Cacho (Lizurume) y Mario (Das Neves), los dos son mis amigos”, dijo ante el aplauso de unos y el silbido de otros, y alzó las manos de ambos. Aunque este gesto y las elogiosas palabras buscaron sumar apoyo al candidato del justicialismo, no estuvieron ajenos a la influencia de los sondeos previos que dan la derecha al hombre del radicalismo. Más tarde, en conferencia de prensa, Kirchner lo dejó en claro: “No hago un apoyo cerrado sobre cualquier candidato que lleve mi partido, porque eso sería una actitud retrógrada, y la Argentina está viviendo una época de transversalidad institucional muy fuerte”.
En su visita, que se inició a la misma hora en la que Eugenio Zaffaroni juraba como nuevo miembro de la Corte Suprema, el Presidente trató de alejar las suspicacias sobre la inminencia de “una Corte kirchnerista”. “Los argentinos hemos perdido tanto la credibilidad entre nosotros, que hacemos una reunión, estamos cinco horas hablando, y después no nos creemos ni lo que hablamos. Por eso es obvio que con todas las cosas que pasaron en la Argentina, piensen que se va la Corte menemista y viene la kirchnerista. Pero estamos haciendo todo el esfuerzo por tener un Poder Judicial independiente.” Con esta salvedad, el Presidente dejó la conferencia y se dirigió al aeropuerto para abordar otra vez el vuelo de Southern-Lafsa, con destino a Río Gallegos.
Informe: Alfredo Ves Losada.