EL PAíS
Caselli, un mal recuerdo
Guardando siempre las formas y el estilo eclesiástico, en el más alto nivel del Episcopado no se oculta sin embargo la contrariedad y el malestar que implica la designación de Esteban Caselli como secretario de Culto de la Nación. Embajador argentino ante el Vaticano entre marzo de 1997 y diciembre de 1999, a Caselli se le reconoce una muy buena relación política y personal con el secretario de Estado vaticano, cardenal Angelo Sodano. Cuando la actual cúpula del Episcopado encabezada por Karlic mantenía una tensa y crítica relación con el gobierno de Menem, Caselli utilizó sus contactos con Sodano para desairar en más de una ocasión a la jerarquía católica argentina y, en otros casos, para favorecer a una decena de obispos claramente “menemistas”. Varios de estos obispos recibieron además subsidios económicos del gobierno de Carlos Menem.