El ex suboficial mayor Héctor René Santillán tomó una decisión extrema un mes después de separarse de su mujer, con quien había mantenido una relación de seis años. En septiembre de 2004 la fue a buscar y la trasladó por la fuerza hasta un descampado de González Catán, jurisdicción en la que se desempeñaba. Allí obligó a la mujer, de 30 años, a ingerir líquido cáustico y después le arrojó la misma sustancia en el rostro. La golpeó en la cabeza y la apuñaló hasta matarla. Peritos médicos comprobaron además que el suboficial había abusado sexualmente en reiteradas ocasiones de varios menores, entre ellos los hijos de su ex pareja, de 7, 5, 3 y 1 año. También les propinaba maltratos físicos y psíquicos. Santillán fue exonerado de la Policía Bonaerense, luego de una investigación iniciada por Asuntos Internos paralela a las causas judiciales abiertas por UFI Nº 1 de La Matanza por “homicidio” y la UFI Nº 3 de Morón por “abuso sexual agravado en siete oportunidades con corrupción agravada y amenazas coactivas reiteradas”.