ESPECTáCULOS
Proyectos para un nuevo año
–¿Qué otros proyectos tiene para el 2004, además del montaje de La hija del aire en el San Martín?
–En Barcelona voy a reponer Babel 46, una obra musical de Xavier Montsalvage, y El niño y los sortilegios, de Maurice Ravel. Después viajo a Nueva York para montar Siroe, una obra de Händel, que en el 2000 estrené en Venecia, en la Escuela Grande de San Juan Evangelista, que pertenece al Teatro La Fenice. El tema central es el poder, y un poco a la manera de Rey Lear, de Shakespeare, en el sentido de que hay un rey que quiere abdicar, pero no sabe cómo dejar el trono a aquel con el que simpatiza y no al que naturalmente debe heredarlo, Siroe, un príncipe moderado. En cuanto termino esa puesta, vuelvo a Buenos Aires.