Sábado, 15 de agosto de 2009 | Hoy
SOCIEDAD › DESCUBREN AL ASESINO DE UN TURISTA POR LAS FOTOS QUE LA VíCTIMA TOMó
La víctima había desaparecido el 23 de julio y su cuerpo apareció calcinado. Los fiscales hallaron las últimas fotos que tomó, en las que aparecen dos baqueanos. Luego hallaron a uno de ellos, que acusó al otro por el crimen.
Antonio Yapura, un baqueano catamarqueño de 19 años que se encuentra ahora detenido e incomunicado, aseguró ante la Justicia que un amigo suyo, que desarrolla su misma actividad, fue el autor material del asesinato del joven músico Sebastián Musacchio, de 22, cuyo cuerpo fue hallado hace unos días en la zona de las ruinas de El Shincal, en la localidad de Londres, departamento de Belén, provincia de Catamarca. Según Yapura, que podría ser imputado como coautor del hecho, el móvil del crimen fue el robo. Yapura acusó a su amigo Santos Quizpe, de 26 años. “Lo mató pegándole un palazo en la cabeza”, dijo el detenido, aludiendo a la forma en que Quizpe, quien se encuentra prófugo, habría asesinado al joven músico nacido en Comodoro Rivadavia. Ayer se supo que Yapura y Quizpe aparecen en algunas fotos, en blanco y negro, que la víctima había sacado con su máquina analógica cuyo rollo fue revelado en Tucumán, donde Musacchio estaba estudiando.
Los fiscales a cargo de la investigación, Analía Mazzucco y Alejandro Dalla Lasta, informaron que el baqueano Yapura aseguró que fue Quizpe quien mató al joven de “un fuerte golpe con un palo en la cabeza cuando se resistió a que le robaran sus pertenencias”. El hecho ocurrió el 23 de julio pasado. Yapura, según los fiscales, habló convencido de que él estaba “libre de culpa del crimen cometido porque, según sus dichos, fue Quizpe el autor del golpe mortal con un palo de grandes dimensiones contra un joven al que describió como ‘rubio’”.
La confesión de Yapura, más el revelado de los rollos fotográficos en el que están retratados los dos baqueanos, parecen cerrar el caso en cuanto a sus autores. Sobre la situación de Quizpe, el fiscal Dalla Lasta dijo que se fugó y que por esa razón se libró un pedido de captura nacional e internacional. De acuerdo con lo dicho por el fiscal, Quizpe sería “una persona altamente peligrosa” y por esa razón “va a ser difícil encontrarlo por ser un baqueano que conoce la zona de Las Vallas, donde vive”.
La búsqueda de los dos baqueanos comenzó a partir de que los fiscales tuvieron en su poder las fotos tomadas por Musacchio durante la recorrida que hizo, en soledad, por la provincia de Catamarca. Los investigadores pudieron seguir el itinerario porque el joven músico había registrado también, en su cámara, todos los paisajes que visitó. Musacchio, que estudiaba en Tucumán, había perdido todo contacto con sus padres, su novia y sus amigos el 23 de julio, día en el que fue asesinado.
El cuerpo fue hallado el 7 de agosto por un camarógrafo de un canal de cable de Belén. La cabeza estaba separada del cuerpo, que estaba semicalcinado. El hallazgo fue en las ruinas arqueológicas El Shincal.
Los fiscales recorrieron varios kilómetros a caballo tanto en esa zona como en el paraje Flores Amarillas, en la búsqueda de los dos jóvenes que habían sido fotografiados por Musacchio.
El músico conocía a Quizpe desde antes del día del crimen y solía recurrir a su ayuda, porque sabía que era un gran conocedor de los caminos de montaña. El baqueano prófugo vivía a unos 500 metros del lugar donde el músico había acampado. Los fiscales dijeron que, en caso de comprobarse que es cierta la versión suministrada por Yapura, el prófugo podría ser imputado por el delito de homicidio calificado por alevosía. Eso significa que podría recibir una pena de prisión perpetua. Yapura, por su parte, puede ser acusado como coautor del hecho.
Quizpe tiene antecedentes por robo a turistas que acampan en la zona. Sobre la situación de Yapura, el fiscal Dalla Lasta admitió que hay que determinar si es “un simple testigo, un encubridor o el autor” del hecho. En la noche del crimen, la víctima y los dos baqueanos habían estado juntos, conversando y tomando cerveza. Fue en esas circunstancias que, según Yapura, el otro baqueano, en forma sorpresiva, “lo mató de un palazo en la cabeza”. La descripción coincide con el diagnóstico de los forenses, que encontraron rastros de un fuerte golpe en la nuca. Luego del crimen, Quizpe habría regresado a la escena del hecho, para prenderle fuego al cuerpo, en un vano intento por borrar las huellas. Los padres del músico denunciaron su desaparición y así se llegó a develar lo ocurrido.
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