En un extraño episodio, Carlos Nair Menem, hijo del ex presidente, se pegó un balazo en el muslo ayer a la madrugada, mientras discutía con un camionero. El incidente ocurrió en el barrio porteño de Palermo y, según el chofer, comenzó porque Menem dejó el auto en doble fila y entró a una tienda turca a comprar un sandwich. Tras los bocinazos, comenzó la discusión. El hijo del riojano dijo sentirse “amenazado” y por eso fue al auto a buscar su arma, pero al tomarla se le escapó un tiro. La versión del camionero es sustancialmente distinta. Dijo que salió del auto, trepó a la puerta del camión, le apuntó a las costillas, forcejearon y se escapó el disparo. Menem fue operado y se encuentra fuera de peligro.

Ariel, que no dio su apellido y habló a las cámaras de espalda, relató ayer que el incidente ocurrió las 3, cuando se dirigía a un corralón de materiales en el que trabaja, por la calle Godoy Cruz. En un momento, dobló en Honduras al 5400 y se topó con un Escort bordó descapotable estacionado en doble fila. Tocó varias veces la bocina y salió Menem (h) de un local de comida turca, con un shawarma en la mano, “sobresaltado, prepotente, con un alto estado de ebriedad y seguramente algo más”, dijo Ariel.

Hubo una primera discusión, agregó el camionero, y el hijo del ex presidente fue hasta el auto a buscar un arma, que según el abogado de Menem, Alejandro Cipollia, estaría registrada. “Yo a vos te voy a dar un tiro para que aprendas”, dijo haber oído el camionero. Ante esta situación, y luego de que varias personas intentaran detener a Menem sin éxito, Ariel se subió al camión para escapar, pero la pelea se trasladó al camión. Y allí, siempre según su versión, se escapó el disparo. El camionero, por temor a que lo “rematara”, huyó al corralón y luego hizo la denuncia en la comisaría 25ª. La causa fue caratulada como “abuso de arma y averiguación de lesiones”.

“El pibe este salió a decir que le puse un arma en el pecho. Lo raro es que yo le ponga un arma en el pecho y el tiro lo tengo yo en la pierna”, señaló ayer Menem a una radio, minutos antes de la intervención quirúrgica en la clínica Los Arcos. Luego dijo que llegó a amenazar al camionero con el arma porque llevaba el cargador por una parte y la pistola, sin balas en la recámara, vacía, abajo del asiento. “Fui a buscar el cargador y cuando agarré el arma se me escapó a mí el tiro. Se me escapó el tiro cuando estaba por bajar del auto”, aseguró.

Menem contó que sólo había tomado una cerveza, no estaba drogado y en el local de comida había mucha cola. “El camionero tocó dos o tres bocinazos, se agarró con uno, se agarró conmigo. Bajó de entrada (del camión), al toque”, agregó. La razón por la que fue a buscar su arma al coche, aclaró, no puede darla porque “está actuando el abogado”. Sin embargo, el ex participante de Gran Hermano Famosos comentó que se sintió amenazado: “Si la estaba bajando (por el arma) fue por algo”. Cipollia afirmó: “Mi cliente fue agredido y él temió por su vida. No fue lo contrario”.

Lo sorprendente, según confiaron fuentes policiales, es que el hijo del senador manejó herido ocho cuadras hasta el sanatorio Los Arcos, al que llegó acompañado por un amigo. Mientras era atendido por los médicos, Ariel declaraba en la comisaría y el camión era inspeccionado por los peritos de la Policía Científica. El Ford Escort de Menem quedó estacionado en la puerta de la clínica hasta las 17, cuando lo llevaron a la comisaría 25ª para peritarlo en el marco de la causa que investiga la jueza correccional porteña Laura Bruniard.

Por la ventana del coche podía verse una vaina servida en el asiento del acompañante, que los investigadores sospechan pudo haber sido recolectada por Menem para no dejar evidencia de la agresión. Desde 2004 a la fecha, el hijo del ex presidente fue protagonista de una extensa serie de accidentes viales. En mayo pasado, tras un juicio abreviado, pagó una multa de 1334 pesos por conducir ebrio en 2009; ese mismo mes chocó a alta velocidad contra un local de comidas rápidas en Núñez.

Anoche, a Menem estaban “a punto de extraerle la bala del muslo, según confirmó su abogado. Su médico personal, Alejandro Druetto, afirmó que no tiene “lesión ósea, vascular ni neurológica”.