El ministro de Justicia y Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, rechazó la veracidad de un informe según el cual entre julio y octubre se recibieron 4881 denuncias por irregularidades en las construcciones que se hacen en la Capital Federal y que el gobierno de Mauricio Macri sólo intervino en 119 casos. “Me sorprende que se quiera hacer política con esto. No se puede seguir haciendo política mintiéndole a la gente”, aseguró Montenegro, en alusión al informe dado por la Superintendencia de Riesgos de Trabajo nacional. Montenegro hizo declaraciones al finalizar una reunión del gabinete porteño, en la cual se analizó la posibilidad de “unificación de inspectores”, a nivel del Gobierno de la Ciudad, para reforzar los controles que se realizan en materia de construcciones.

La idea de la unificación fue expresada también por el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta: “Es fundamental unificar inspecciones, para que cuando vaya un inspector de trabajo también pueda verificar la obra, y para eso hay que corregir una ley en la Legislatura”. Por su parte, el ministro de Desarrollo Económico, Francisco Cabrera, precisó que el trabajo conjunto significa que “se coordinen los actos de control que realizan la Agencia Gubernamental de Control, la Subsecretaría de Trabajo y la Agencia de Protección Ambiental”.

En lo que hace a la desmentida del informe de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo nacional, tanto Rodríguez Larreta como Cabrera sostuvieron que “en los últimos meses hubo más de 18.000 inspecciones en la Ciudad, de las cuales 6600 fueron en obras” en construcción. Agregaron que “cinco de las siete denuncias recibidas por la obra de la calle Bartolomé Mitre fueron por la seguridad de trabajadores, que tienen que ver con el uso de cascos y la existencia de comedor en el lugar”. Aseguraron que no hubo denuncias que estuvieran relacionadas con “la estructura y modalidad de trabajo” y que indicaran, en consecuencia, “que pudiera estar en riesgo el edificio lindante”. Sin embargo, fue un inspector de la Ciudad el que advirtió del riesgo un mes antes del derrumbe.