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Las autoridades de Pensilvania identificaron a Alex Hribal como el atacante del instituto Franklin Regional de Murrysville que agredió a más de veinte personas a golpes de cuchillo. El estudiante, de 16 años, será juzgado como un adulto por los ataques realizados el miércoles a la mañana. Su abogado, Patrick Thomassey, sostuvo que el joven nunca tuvo problemas psiquiátricos y no había estado involucrado antes en problemas con sus compañeros. Timothy Van Fleet, doctor del servicio de urgencias del Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh, comunicó que cuatro de los heridos se encuentran en situación “grave”.

Hribal se encuentra detenido sin derecho a fianza en el centro de detención juvenil del condado de Westmoreland por agredir con dos cuchillos de cocina a 21 personas, uno de ellos un adulto. El joven se enfrenta a cuatro cargos de intento de homicidio, 21 cargos de asalto agravado y un cargo por posesión de un arma en la escuela.

Según las autoridades, Hribal comenzó su ataque en la escuela secundaria Franklin, de la localidad Murrysville, unos 40 kilómetros al este de Pittsburg, por la mañana, antes de que empezaran las clases. Entró con dos cuchillos de entre 20 y 25 centímetros y fue atacando a quienes encontraba a su paso en distintas aulas y por uno de los pasillos del establecimiento. En una de las alas del edificio fue interceptado por dos guardias del centro y el subdirector de la escuela, Sam King, de acuerdo con el vocero de la compañía de seguridad, Mark Drear. Uno de los guardias resultó herido en el forcejeo.

En total, cuatro de los heridos se encuentran en situación “crítica” o “grave”, señaló Timothy Van Fleet, del servicio de urgencias del Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh. Por su parte, el director del hospital Forbes Regional, Chris Kaufmann, sostuvo que los ingresados en ese centro presentaban heridas en el torso, el abdomen, el pecho y la espalda. “Ninguna de estas heridas son superficiales. Todas y cada una son puñaladas de carácter significativo”, agregó.

Thomassey, el abogado del joven, indicó que Hribal nunca tuvo problemas psiquiátricos, era un buen estudiante, se relacionaba con sus compañeros y nunca había estado metido en problemas hasta el incidente de ayer. “Los padres “están destrozados, no pueden comprender qué le ha ocurrido y expresan sus condolencias a todos los afectados”, declaró.

Para el abogado, Hribal no era un chico solitario ni tampoco la familia tenía conocimiento de que el muchacho hubiese sido blanco de abusos o prepotencias que hubiesen podido provocar el ataque. “Alex está asustado. Es un muchachito con buenas notas y un hogar y una familia estables. Tiene 16 años y parece un chico de doce”, comentó Thomassey.

Algunos compañeros de clase, por su parte, dieron descripciones variadas en las que coincidían en que el joven que era más bien tímido y que se relacionaba poco con otros alumnos. Morgan Ritchey, una de las alumnas de la escuela que compartía dos clases con Hribal, lo describió como “un poco incomprendido”. “Siempre sentí que había en él un aspecto diferente que nadie conocía y que era, digamos, difícil de descubrir”, opinó.