Una estudiante chilena de 21 años que seguía la carrera de Ciencias de la Comunicación en Buenos Aires fue asesinada a puñaladas en la puerta de acceso al departamento en el que estaba viviendo, en el barrio porteño de Almagro. En principio se descarta el móvil del robo y la sospecha está centrada en un joven, cuya identidad se desconoce, que la víctima habría conocido horas antes del hecho en un boliche bailable. La joven, que recibió diez heridas en distintas partes del cuerpo, una de ellas mortal, en el cuello, logró entrar al hall del departamento y murió desangrada antes de llegar a su departamento de la planta baja. Horas después el cadáver fue encontrado por un vecino. Es importante el testimonio de dos brasileñas, que convivían con la chica fallecida, y que la habían acompañado al local bailable, del que se retiraron antes que ella.

La víctima fue identificada como Nicole Teresa Sessarego Bórquez, de 21 años, quien estaba realizando un intercambio estudiantil en la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Buenos Aires (UBA). El cuerpo fue hallado a las 7.10 de ayer por un chico que salía hacia el colegio y se topó con la tremenda escena. “Cuando mi hijo la encontró, ya estaba fallecida”, relató a la prensa una vecina del edificio ubicado en Don Bosco 4109. La mujer comentó que cerca de las 6 había escuchado “un grito de auxilio”, que luego relacionó con el suceso.

La vecina, que vive en un departamento del primer piso, dijo que la chica asesinada vivía en la planta baja, junto con dos mujeres y dos varones que también son estudiantes. Cuando la encontraron, Nicole tenía en sus manos las llaves que le habían permitido ingresar al edificio, a pesar de estar gravemente herida.

Las pericias determinaron que Sessarego Bórquez presentaba varias puñaladas y habría sido atacada en la vereda. La víctima tenía todas sus pertenencias, incluyendo el dinero, de manera que en principio se descartó el móvil del robo. Fue allanado el departamento donde vivía la chica con el fin de secuestrar objetos personales que puedan orientar la investigación.

Un amigo de Nicole llamado Pablo, también chileno, contó a los medios que había conocido a la joven hace un par de semanas en un cumpleaños que se festejó en su casa con otros chicos que, como ella, se encontraban realizando un intercambio. Pablo dijo que anoche la había invitado a cenar en su casa, pero que ella le dijo, vía Facebook, que se iba a bailar a un boliche llamado Club Severino, en Lavalle 345, con otros amigos.

Según el joven, en ese lugar se realiza, todos los lunes, una fiesta electrónica a la que la víctima había concurrido la semana pasada y le había gustado mucho, a pesar de que le habían robado o había perdido el celular. El joven dijo que la había visto por última vez el domingo, cuando ella había ido a su casa a comer un asado y luego vieron juntos el partido final de la Copa del Mundo entre Alemania y Argentina.

Pablo dijo que, al enterarse ayer de la muerte de su amiga, le mandó un mensaje a Nicole diciéndole: “Por favor, dime que no eres tú”. Pablo dijo que Nicole llegó al país en febrero a través de un “convenio de movilidad e intercambio” estudiantil.

En el caso intervienen la seccional 10, la División Homicidios de la Federal y la Unidad Criminalística Móvil de la fuerza, bajo las órdenes de la fiscal Ana Yacobucci y el juez Luis Zelaya. Las chicas que vivían con la víctima habrían confirmado que fueron a bailar esa noche al boliche de la calle Lavalle; ellas dos volvieron a casa temprano y la víctima se habría quedado con un chico que conoció en el baile y al que se trata de ubicar. Al mismo tiempo, se procuran analizar las imágenes captadas por una cámara de seguridad ubicada sobre la calle Don Bosco al 4100, una de ellas muy cerca de la entrada al edificio donde vivía la joven.