Un jardinero de 45 años fue detenido por la policía acusado de haber abusado y ocultado a una adolescente de 15 años, a quien sedujo por Facebook. La familia buscó a la joven durante ocho días hasta que finalmente apareció en su casa en Tortuguitas. Prófugo de la Justicia, el hombre se hacía pasar por “Rodo” en las redes sociales, donde afirmaba tener 25 años y usaba los contactos de su hija de 14 para chatear con sus potenciales víctimas. La adolescente en cuestión era una de ellas, a quien el jardinero le regalaba cosas, la sacaba a pasear en auto, hasta que la llevó a una pensión en Garín y arrendó un cuarto con la excusa de que se estaba por separar de su mujer. La aparición de la joven ocurrió cuando se había organizado una nueva marcha por parte de la comunidad del colegio al que asiste.

El hombre se desempeñaba como jardinero en un country en la localidad bonaerense de Pilar y quedó detenido acusado de abuso sexual agravado por ser la víctima menor de edad, corrupción de menores y privación ilegal de la libertad. Está previsto que el detenido declare “en los próximos días” ante la Justicia.

Según los investigadores, el jardinero sedujo por Facebook a la adolescente, quien estuvo desaparecida durante ocho días de su casa de la localidad bonaerense de Tortuguitas, luego de salir del colegio privado al que concurre. El hombre sedujo a la joven, le hizo llegar regalos para seducirla –entre ellos un celular–, la pasaba a buscar por el colegio para pasearla en un Renault Fluence negro y entabló con ella una relación durante los últimos cinco meses, según la investigación encabezada por el fiscal general adjunto de San Isidro, Marcelo Vaiani.

El día de su desaparición, la adolescente asistió a la escuela y las cámaras de seguridad la ubicaban sin compañía en la estación de trenes Manuel Alberti. “Me voy por un tiempo, no me busquen porque no me van a encontrar”, decía la nota que los padres reafirman que fue escrita bajo presión por su apropiador. La fiscalía, que analizó los cruces de las comunicaciones entre los celulares de la niña y del sospechoso, cree que la chica de 15 años estuvo cautiva en una pensión de Garín, donde el imputado la dejaba encerrada bajo llave y le decía que no saliera.

A sólo 15 cuadras del domicilio de la adolescente, el jardinero vivía en una casa con su mujer, su hija de 14 años y una cuñada. Ante la presión sobre el caso, con varias marchas de vecinos y la repercusión mediática, el jardinero se tomó un remise con la chica y la dejó en la esquina de la casa de sus padres. La joven, que apareció el miércoles tras haber sido vista por última vez el 12 de agosto pasado, fue trasladada a la DDI de San Isidro para declarar con una psicóloga y en cámara Gesell, lo cual está previsto para los próximos días. “Está bajoneada, pero la llevaron al médico y está bien, no fue golpeada”, señaló Mario, el padre de la chica, y afirmó que su hija “fue forzada” a no volver a su casa.

La policía finalmente logró atrapar al jardinero cuando, el miércoles por la mañana, dos personas, haciéndose pasar por abogados, fueron a la Fiscalía de San Isidro para averiguar el estado de la causa. El fiscal consideró sospechosa esta actitud y mandó a seguir a los dos personajes quienes llegaron hasta un auto donde se encontraba el jardinero, con el rostro semicubierto por una gorra y aguardando a sus amigos para enterarse sobre el estado de la causa.