La Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) pidió que ocho agentes de la Gendarmería y un médico de esa fuerza sean citados a declaración indagatoria por las lesiones a seis jóvenes demorados en el barrio porteño de Villa Soldati. Los acusados “golpearon incesantemente, insultaron y humillaron a los detenidos, tanto en la vía pública, como en el posterior traslado” a la unidad de control que Gendarmería tiene en la avenida 27 de Febrero 6002 “ocasionándoles a las víctimas un grave sufrimiento tanto físico como psíquico”. “El ejercicio de violencia, intimidación y uso coactivo de la fuerza incluyó una situación de sometimiento sexual padecida por una de las víctimas”, añadió la web www.fiscales.gob.ar. El requerimiento de la Procuvin fue elevado al Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional número 9, tanto de los agentes como del médico que habría omitido certificar las mismas. Página/12 relató ayer la situación vivida por otros dos jóvenes de la Villa 21 que fueron detenidos por policías de la Federal y de Prefectura que luego los torturaron, el sábado a la noche. En total habrían participado más de veinte agentes. Uno de ellos ya se encuentra detenido por orden del fiscal Marcelo Munilla Lacasa. A los dos jóvenes los golpearon en la cara, les dieron palazos en el cuerpo y los sometieron a un simulacro de fusilamiento. Finalmente los liberaron, pero, según contó la abogada, “antes de liberarlos les robaron todas sus pertenencias, hasta las zapatillas”.