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Hoy a mediodía, el médico Néstor Morelli, acusado por el asesinato del cardiólogo José Martínez Martínez, ocurrido en mayo de 2003, hará su último descargo, horas antes de la lectura de la sentencia. El fallo es una incógnita a partir de la decisión del fiscal del juicio oral, Guillermo Freile, de pedir la absolución del imputado por “falta de pruebas”. El fiscal consideró que “a lo largo de la investigación sólo se han recolectado incertidumbres y conjeturas que no sirven para condenarlo” a Morelli. Una de las principales trabas, según Freile, es que nunca se encontró el arma utilizada en el hecho, una pistola con silenciador similar a la que tenía Morelli, según dijeron varios testigos. El pedido fiscal, acompañado como es obvio por la defensa, choca con la opinión de la abogada querellante, Delia Oieni, que solicitó que Morelli sea condenado a reclusión perpetua. El fiscal sostuvo que en el juicio “sólo se ha probado fehacientemente que Morelli era un médico conflictivo y que Martínez Martínez lo quería fuera del servicio” de cardiología del Hospital de Clínicas. Para Freile, en la audiencia, por la que pasaron más de cien testigos, “se ha ido desvaneciendo” el supuesto móvil del crimen, que sería la fuerte rivalidad que existía entre el acusado y la víctima. La querella, en cambio, sostuvo que hay pruebas para condenar a Morelli por el crimen. Hoy se conocerá el fallo del Tribunal Oral 23.