Los 1200 camiones de caudales que hay en el país serán revisados para verificar si cumplen con las condiciones de seguridad necesarias para circular, y se ampliará el número de efectivos policiales que custodian los bancos de la ciudad de Buenos Aires, como parte del acuerdo anunciado ayer por el titular del Sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, entre ese gremio, la Cámara de Transporte de Caudales y el Gobierno. De acuerdo con lo informado por Moyano, el compromiso fue asumido por el ministro de Interior, Aníbal Fernández, en una reunión realizada en el mediodía de ayer en la Casa Rosada. La inspección de la seguridad en los vehículos la llevará adelante el Registro Nacional de Armas (Renar) y el gremialista aseveró que “el que no cumpla con las condiciones para los trabajadores, no va a salir”. Además de este punto –y siempre según Moyano–, el ministro recibió también el pedido de los representantes de los conductores de los camiones para que un policía los reciba y asista cuando descienden las sacas con el dinero en los bancos, uno de los reclamos que con más fuerza habían elevado tras el asesinato de uno de ellos ocurrido la semana pasada durante el asalto a una entidad financiera en Lomas de Zamora. “Se está estudiando también poner mangas en los bancos que vayan directamente al depósito, para que el camionero no tenga que bajar, pero eso será más adelante”, indicó Moyano, quien además destacó que los propietarios de los portavalores renovaron el compromiso para poner un segundo custodio en horas nocturnas a partir del 1º de abril. No obstante las medidas, el sindicalista afirmó que el paro de los conductores de los blindados continúa en suspenso por 30 días, luego del que realizaron el pasado miércoles en repudio al crimen en Lomas.