“Tanto tiempo nadé junto a los animales, que creyeron que era uno de ellos.” Con buen humor, el nadador esloveno Martin Strel describió así su última hazaña: nadar completos los 5268 kilómetros del río Amazonas. En el recorrido se las tuvo que ver con pirañas y cocodrilos y terminó varias veces insolado y con delirios. La proeza le demandó 66 días: había salido de la ciudad peruana de Atalaya el 1º de febrero y llegó el sábado a la desembocadura brasileña en el Atlántico. Strel nadó unos 80 kilómetros por día, aunque en las últimas semanas el cansancio redujo el promedio a 50. En su haber tiene el recorrido completo del Mississippi y el Paraná, entre otros.