Anoche, en la zona aledaña a la Quebrada de San Lorenzo, unas cincuenta personas, en su mayoría familiares de algunos de los siete detenidos por el doble crimen de las turistas francesas Houria Momni y Cassandre Bouvier, realizaron una marcha afirmando de viva voz que sus parientes “son inocentes” y reclamando que se busque “a los verdaderos responsables de este crimen”. La manifestación, que se hizo sin incidentes, fue custodiada a la distancia por efectivos de la Policía de Salta, una fuerza muy cuestionada, por sus métodos, por la gente que vive en los barrios pobres de San Lorenzo.

Entre los manifestantes se encontraba Francisco Ariel Tejeda, un puestero de la zona que fue el primer detenido en la causa, liberado a las pocas horas por falta de pruebas en su contra. El hombre, luego de recuperar su libertad, denunció haber sufrido golpes y apremios ilegales por parte de la Brigada de Investigaciones. En la manifestación había un buen número de familiares de los detenidos Walter Orlando y Gustavo Lasi, padre e hijo respectivamente. Filomena, la mamá de Gustavo, dijo que tanto su hijo como su marido son inocentes. Analía, prima y sobrina de los detenidos, denunció que Gustavo fue golpeado cuando lo detuvieron. De todos modos, en declaraciones que había hecho a la prensa local, Filomena había reconocido que la carabina que se utilizó en el crimen pertenece a su esposo.