El monólogo de Gabriela Acher generó sorpresa en un ámbito habitualmente acartonado.
Imagen: DyN.

La actriz y humorista Gabriela Acher rompió ayer la solemnidad que suele caracterizar a la Corte Suprema y frente al presidente del alto tribunal, Ricardo Lorenzetti, a las ministras Carmen Argibay y Elena Highton de Nolasco y a la presidenta provisional del Senado, Beatriz Rojkés de Alperovich, entre otras autoridades, hizo un divertido y jugado monólogo, sobre los estereotipos de género, en el que hipotetizó, entre otras situaciones, sobre qué pasaría si los hombres menstruaran o se embarazaran.

Fue el cierre del acto de conmemoración del Día Internacional de la Mujer, convocado por la Corte, y que encabezó Argibay, a cargo de la Oficina de la Mujer del alto tribunal. “Crecí en una cultura que sostenía que la envidia del pene era algo natural. Que me perdone Freud, pero yo nunca quise tener un pene que no venga con un hombre incluido”, dijo Acher como parte de su pequeño show, mientras algunos de los presentes se veían algo turbados y otras estallaban en tímidas carcajadas, en un salón del cuarto piso del Palacio de Tribunales repleto de referentes del Poder Judicial y el ámbito académico del Derecho, funcionarias y legisladoras.

Durante el acto, Argibay anunció el lanzamiento de los primeros talleres de capacitación sobre género y trata de personas para explotación sexual dirigidos a funcionarios –magistrados, fiscales, defensores– del Poder Judicial en todo el país. El contenido de los talleres fue elaborado durante 2011 por la Oficina de la Mujer juntamente con la Unidad Fiscal de Asistencia en Secuestros Extorsivos y Trata de Personas (Ufase), que depende de la Procuración General de la Nación. El último año, contó Argibay, se capacitaron 300 “replicadores” designados por la Ufase y la Justicia y otros 80 que se sumaron del Ministerio de Seguridad, que serán las personas encargadas de impartir los cursos en cada jurisdicción, en todo el país. El objetivo es que comprendan las características de la trata para explotación sexual, se sensibilicen en relación con ese flagelo y de esa forma, se logren eliminar prejuicios y otras barreras que persisten en el ámbito judicial y de las fuerzas de seguridad, que conspiran contra la persecución y sanción del delito. “Es un tema preocupante para toda la sociedad”, dijo Argibay, sobre la trata de mujeres para explotación sexual.

Como parte de la ceremonia, Argibay y Rojkés firmaron un convenio para que los mismos talleres se lleven adelante para el personal del Poder Legislativo. Argibay anunció además que se creará una base de datos con la recopilación de los fallos sobre derechos de las mujeres de todo el país, al que se podrá acceder on line.

La secretaria de Trabajo, Noemí Rial; el titular de la Auditoría General de la Nación, Leandro Despouy; la defensora general de la Nación, Stella Maris Martínez; el vicepresidente del Consejo de la Magistratura, Mario Fera; el presidente de la Asociación de Magistrados, Luis María Cabral, fueron parte de los invitados especiales.

Esta es la segunda tanda de talleres con los cuales la Oficina de la Mujer busca sensibilizar sobre cuestiones de género a los integrantes de los tribunales. Los primeros apuntaron a promover la perspectiva de género y según se destacó ayer, en esos cursos, que se vienen impartiendo en todo el país, ya participaron un poco más de diez mil agentes, entre empleados, funcionarios, algunos jueces y varias ministras de cortes provinciales.

En años anteriores, también el cierre de la conmemoración del Día de la Mujer, organizada por la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema, estuvo a cargo de un número artístico. En esta oportunidad, dijo Argibay, “para pelear contra los estereotipos elegimos el humor”. El monólogo de Acher estuvo cargado de chistes sobre prejuicios machistas y las desigualdades que todavía enfrentan las mujeres en la sociedad.