En Concordia, una niña de 11 años víctima de una violación ayer dio a luz a una beba, meses después de que sus padres, pese a la autorización concedida por la Justicia para interrumpir el embarazo, decidieran que ella continuara con el embarazo. La chica, oriunda de General Campos, dio a luz una beba de tres kilos en el hospital público Delicia Massvernat. El caso se conoció públicamente en enero, cuando sus padres, de recursos escasos, pidieron que se le practicara un aborto porque un amigo de la familia la había violado. El juez de Familia Oscar Tomaselli lo concedió. Sin embargo, al considerar que la gestación se hallaba avanzada y corría riesgo la salud de la niña, su familia resolvió que la pequeña continuara con el embarazo. Ante el caso, el ministro de Salud provincial, Hugo Cettour, se había pronunciado en contra del aborto. Hubo denuncias de que la familia fue presionada para evitar la interrupción del embarazo.