Francisco ha tratado de mantenerse alejado de la política argentina y de sus internas. Se sabe de su enojo cuando un periodista del diario La Nación inventó una supuesta “mediación” para el diálogo social. Ha sido cortés con el gobierno nacional y con la Presidenta y evita, por todos los medios, entrar en el juego de quienes pretenden usarlo políticamente. A varios de sus interlocutores les ha dicho expresamente que “cuiden a la Presidenta”. Desde aquí son muchos los que buscan la foto con Francisco. Generalmente accede a todas las fotos, sin distinción. Otra cosa son los diálogos de fondo, que generalmente son privados y sobre los que no hay publicidad. Esos los maneja el propio Bergoglio, al margen de la agenda oficial. Por lo general, esas entrevistas se realizan en la residencia de Santa Marta, donde vive el Papa, por las tardes y fuera de la agenda oficial que gestiona la Casa Pontificia.

El reciente gesto de Bergoglio al pedir la renovación de su pasaporte argentino es un guiño más hacia el país y hacia los argentinos. Y la decisión de venir al país sólo en el 2016 tiene la doble intención de quitarle presión al gobierno actual y evitar todo uso electoral de su visita en medio de una campaña que se sabe será áspera.

Mientras la mayoría de los argentinos se ufana del “papa argentino”, los obispos católicos no terminan de ubicarse frente a la situación. Se muestran desconcertados. No pueden negar el liderazgo de Francisco, pero no saben cómo traducirlo en su acción cotidiana en el país. La Iglesia ha ganado espacio con Francisco, pero los obispos no saben cómo proceder con ello. También se sienten presionados frente a hechos tales como el diálogo de Bergoglio con las Abuelas de Plaza de Mayo y su compromiso de cooperar con la información que la Iglesia tiene sobre casos de desapariciones durante la dictadura militar. Los obispos sienten que Francisco les ha depositado en las manos una “papa caliente” de la que no saben cómo deshacerse. Y tienen miedo de que, si no actúan rápido, el propio Papa se les adelante con alguna decisión.