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El cantante de Callejeros, Patricio Fontanet, presentó una denuncia judicial contra los padres de una de las 194 víctimas del incendio del boliche República Cromañón que “agredieron y amenazaron” a su padre. La denuncia fue presentada ante el juez Julio Lucini, a quien también le solicitó que arbitrara las medidas necesarias para su protección y la de su familia. El matrimonio acusado dice que todo fue al revés, que el padre del cantante les “quiso pegar con un hierro”, además de haberse referido de mal modo a las víctimas de la tragedia. El abogado de Callejeros, Mariano Silvestroni, dijo que con este tipo de actitudes los querellantes “están empiojando, arruinando su propia causa”, y adelantó que endurecerá su defensa.
El hecho ocurrió el 22 de junio, día en el que Sebastián Bonomini, hijo del matrimonio acusado, hubiera cumplido 25 años. Según la denuncia, Nora y Daniel Bonomini fueron hasta el comercio de José Fontanet, en un barrio del partido bonaerense de La Matanza, y “de forma agresiva y desaforada” lo “agredieron” y dijeron que “le iban a pegar un tiro”, además de arrojar objetos del comercio al suelo, indicó Pato Fontanet en su escrito. Su padre radicó la denuncia del hecho en la comisaría de Villa Recondo y, al día siguiente, según la misma denuncia, Nora Bonomini se presentó nuevamente en el comercio, “insultó a mi padre, le dijo que mi madre vendía bengalas”.
“¡Qué lo voy a amenazar!, no tengo un arma y ni siquiera sé manejarlas”, se defendió Daniel Bonomini. Según el relato que hizo a Página/12, “fue todo al revés. Mi esposa fue hasta el negocio de Fontanet porque unos amigos del barrio nos contaron que ese tipo dijo que los chicos de Cromañón eran todos faloperos”. “Fui y le pregunté por qué había dicho esas cosas –relató Nora Bonomini–. No me dejó terminar de hablar, me insultó y dijo que ‘los que murieron bien muertos están’. Sacó una barreta, me amenazó y luego mi marido me defendió. Pero en ningún momento lo amenazamos.”
Por su parte, en diálogo con este diario, el abogado de Callejeros, Mariano Silvestroni, observó que “los querellantes están empiojando, arruinando su propia causa y se están perjudicando ellos mismos”. El abogado adelantó que en los próximos días presentará una “falta de excepción” que podría afectar a los Bonomini en tanto querellantes en la causa del incendio del boliche de Once. “Cuando una persona se siente damnificada por un delito y es querellante, es porque elige las vías de derecho para resolver el caso. Pero si lo que utiliza son las vías de hecho, entonces se está apartando de la ley”, explicó.
“Más allá de lo que pasó, ¿qué tiene que hacer un querellante en el almacén del padre de un imputado?”, añadió, a la vez que consideró que hechos de ese tipo son parte de “las anormalidades” que ocurren “todos los días con (Omar) Chabán y los jueces de Cámara que fallaron en contra de lo que opinaba la querella”.
Por su parte, la madre de Sebastián adelantó que irá “a hablar con el juez para contarle lo que pasó. No tengo nada que temer, sé que al no mentir no me tengo que esconder detrás de mi abogado”, José Iglesias, quien también es padre de una de las víctimas. Por el hecho, el Pato Fontanet pidió a Lucini que ordenara a los Bonomini “abstenerse de tener contacto conmigo o cualquier miembro de mi familia” y se impida conocer sus datos personales. Además de este escrito, Silvestroni presentó un pedido para que Juan Carbone, saxofonista de la banda, pueda ampliar su indagatoria a fin de desmentir algunas de las explicaciones que dio Chabán en el marco de su defensa.

Informe: Adrián Figueroa Díaz.