El cambio de la hora oficial se estableció a través del decreto 1693 publicado el jueves en el Boletín Oficial, que lleva la firma de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner; del jefe de Gabinete, Sergio Massa, y del ministro de Planificación, Julio De Vido.

La modificación del huso horario será adoptada, en especial, por las provincias ubicadas sobre el eje centro y este del país. Por otro decreto, el gobierno exceptuó del cambio horario a las provincias de Catamarca, La Rioja, Mendoza, Salta, San Juan, San Luis, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.

El cambio de huso horario quedó establecido a través de la ley 26.350 votada por el Congreso de la Nación en diciembre del año pasado. En ese período el adelantamiento de los relojes se puso en marcha en la medianoche del sábado 29 de diciembre y finalizó el tercer domingo de marzo.

Dicha ley establece como hora oficial en todo el territorio nacional durante el período invernal la del Huso Horario de Tres Horas al Oeste de Greenwich, en tanto que durante el verano se establece como hora oficial la del Huso Dos Horas al Oeste de Greenwich.

Desde el año 1920 a la fecha, se efectuaron 56 cambios en la hora oficial, que han variado entre el Huso 2 y Huso 4, según un informe elaborado por el Observatorio Naval Buenos Aires.

Al fundamentar el cambio de hora, el gobierno tomó en cuenta una evaluación realizada en mayo pasado por la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA), en el que se recomienda "la conveniencia de la aplicación del Huso Horario dos horas al Oeste del meridiano de Greenwich, durante el período estival". Según las autoridades, esto se traduce en "ventajas

significativas en el ahorro de energía", y constituye una "alternativa ventajosa para disminuir tanto la potencia máxima como el consumo de energía eléctrica".

Además esgrime que la reducción del consumo de energía eléctrica "traería aparejada una disminución del uso de combustibles y, consecuentemente, la de emisiones de Dióxido de Carbono contribuyendo a una significativa reducción de los Gases de Efecto Invernadero".

En sus considerandos, el decreto recuerda también que los países integrantes del Mercosur, "establecen sus horarios respecto del período invernal y estival" en base a un criterio en el que se privilegia el ahorro de energía que representa la medida.