Miércoles, 23 de abril de 2014 | Hoy
16:05 › EN CADENA NACIONAL
Durante la presentación de nuevo material rodante en la línea del ferrocarril San Martín, la presidenta Cristina Kirchner desmintió que exista un conflicto con el sector empresarial y sostuvo que el gobierno nacional "apuesta a la alianza estratégica entre lo público y lo privado para que el país prospere y la gente viva mejor".
La jefa de Estado hizo referencia a las supuestas diferencias con el empresariado nacional luego de entregar en mano, a los representantes de distintas cámaras del sector, la autorización para que los camiones denominados bitrenes circulen en las rutas nacionales. La mandataria destacó que la iniciativa permitirá un 80 por ciento más de carga en esos transportes y significará ahorro de combustible, tránsito y una posibilidad más para las economías regionales.
Además, la mandataria anunció que el ministro de Economía, Axel Kicillof, firmaba este mediodía un préstamo con el canciller de China, Wang Yi, para finalizar las obras del Belgrano Cargas, que "darán mayor competitividad a las economías regionales". "No es que las cosas no se quieran hacer sino que hay que conseguir el financiamiento", indicó Cristina.
En el acto desde la estación Saenz Peña, acompañada por el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, la jefa de Estado resaltó que "al fin del trienio 2013-2015, el gobierno habrá destinado 1.600 millones de dólares en la renovación de todas las líneas ferroviarias del área metropolitana".
"Las cosas demandan tiempo, paciencia y que no haya intereses encontrados. Les pido a los usuarios y a los trabajadores, que nos ayuden a tener un servicio que funcione mejor para que no vuelva el discurso de que lo privado es mejor que lo público", indicó la mandataria y agregó: "Como en un tren, todo está enganchado, una presidenta sola no puede. Lo que hacemos es con recursos de todos".
Además, la presidenta precisó que en la compra del nuevo material rodante para la línea San Martín se invirtieron 300 millones de pesos en el extranjero porque "las fábricas nacionales de trenes, que existían en la época de Perón, fuero devastadas", aunque destacó con los durmientes y el acero de las vías ya son de producción nacional.
"Estamos mucho mejor que en 2003, hace 50 años que no había nuevos trenes en la Argentina, pero ¿qué pasó con las fábricas de punta que teníamos en el país? En el '93, el gobierno que cerró los trenes, luego ganó las elecciones, que eso nos sirva de lección. Sepamos distinguir lo concreto, lo real, lo que se puede ver y tocar, de los cantos de sirena".
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