"Si para hacer las cosas bien, es necesario extender los 18 meses, vamos a hacerlo. No pasa nada si se alarga unos meses más", aseveró el sucesor de Artur Mas, durante una entrevista televisiva en la que, además, reconoció que los independentistas todavía no tienen la fuerza suficiente en el Parlamento local para proclamar la secesión, aunque sí para iniciar el proceso.

Puigdemont dijo que "no está previsto en nuestro compromiso electoral hacer una declaración unilateral de independencia" pero aclaró que "sí tenemos fuerza y legitimidad democrática para iniciar este trayecto".

En su criterio, la clave es la aprobación de una Constitución catalana que sea aceptada por los ciudadanos de la región, de 7,5 millones de habitantes. "El objetivo es que una mayoría de la gente que hubiera votado 'no' en un referéndum vote 'sí' a una Constitución con la que se pueda identificar mucho más que con la española", señaló.

La Cámara regional aprobó el pasado 9 de noviembre una resolución para iniciar el proceso hacia la independencia, que fue anulada por el Tribunal Constitucional tras haber sido impugnada por el Gobierno español de Mariano Rajoy.