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Los jueces Carlos Rozanski, Roberto Falcone y Mario Portela revocaron el beneficio de los apropiadores al considerar que el "estado de salud así se los permite" por lo que ambos irán ahora al Complejo Penitenciario Federal II del partido bonaerense de Marcos Paz.

Alonso y Herzberg fueron condenados por la apropiación, en 1977, de María Natalia Suárez Corvalán, nacida en cautiverio en el centro de detención clandestino de "La Cacha". Al declarar en el juicio, Alonso aseguró que su amigo Herzberg le entregó a su mujer la niña recién nacida, diciendo que era la hija de un superior suyo en la Marina, y que esta mujer había tenido problemas en el parto y por esa razón había fallecido luego de dar a luz.

María Natalia Suárez Nelson Corvalán nació a principios de agosto de 1977, durante el cautiverio de su madre, María Elena Corvalán, que había sido secuestrada cuando ya estaba embarazada de ocho meses. Mientras cursaba sociología en la Universidad Nacional de La Plata, María Elena comenzó su militancia en la Juventud Universitaria Peronista (JUP) y allí conoció a Mario César Suárez Nelson, que era barítono y estudiaba veterinaria, con el que militó en la organización Montoneros hasta que fueron secuestrados.

Se cree, no obstante, que María Elena fue trasladada al hospital de la Unidad 8 de Olmos, lugar que funcionó como maternidad clandestina y adonde fueron trasladadas varias mujeres embarazadas que se encontraban detenidas ilegalmente en "La Cacha".

Se presume que quien se comunicó con la familia de María Elena para anunciar el nacimiento de la niña, a la que había llamado Lucía, fue la enfermera Hilda Delgadillo, secuestrada el 22 de agosto de 1977 y llevada a "La Cacha".

Si bien las Abuelas de Plaza de Mayo hacía tiempo que tenían sospechas de que Alonso se había apropiado de una hija de desaparecidos, los análisis de ADN recién lo confirmaron en junio de 2006, cuando se logró realizar los exámenes a través de una medida judicial alternativa a la extracción de sangre.

De acuerdo al alegato que hicieron las Abuelas en el juicio oral, Alonso encaró distintas estrategias para evitar que María Natalia pudiera conocer su origen. "Al enterarse de que se había iniciado una causa, declaró ante la Justicia que era su hija biológica, que había nacido en el domicilio en momentos en que él no estaba; y otras personas adscribieron a la misma ficción sobre el embarazo" de su esposa, denunciaron.