¿Se hará la asamblea de la UBA en el Congreso? Los decanos esperan recibir hoy una respuesta oficial del Gobierno para saber si cuentan o no con la sede. Ayer eran optimistas e incluso preveían que, en lugar de convocar la elección del rector para el viernes 15, como pensaban, el llamado se postergaría hasta el lunes 18, cuando habría mayor disponibilidad de lugar en la Cámara de Diputados. Las autoridades de la universidad aspiran a poder formalizar la convocatoria pasado mañana, en una sesión del Consejo Superior. Por si la FUBA consigue frustrar la sesión, ya comenzaron a preparar una posible autoconvocatoria de la asamblea.

Este jueves a las 9, en el rectorado, debería reunirse el Consejo Superior para tratar un temario cuyo primer punto –por delante de los centenares de expedientes ordinarios demorados– es la convocatoria a la asamblea universitaria. Apelando ante la Cámara Federal, el vicerrector Aníbal Franco hizo la semana pasada una nueva presentación judicial en busca de garantías para la reunión. “Esperamos que la Justicia colabore con la universidad y tome las medidas necesarias para que pueda funcionar el consejo”, dijo a este diario el decano de Veterinarias, Rubén Hallú, quien integra, junto al decano de Arquitectura, Jaime Sorín, la fórmula propuesta por la mayoría de decanos para gobernar la UBA.

“Los estudiantes nos vamos a movilizar para que no se convoque a la elección del rector hasta que no se democratice la universidad. Pero sí queremos que se traten todos los temas pendientes en el consejo –dijo Juan Pablo Rodríguez, copresidente de la FUBA–. También vamos a llevar la propuesta de que se organice un plebiscito sobre la reforma del estatuto. Estamos abiertos a buscar el mejor método para que toda la comunidad universitaria se pueda expresar. Si no es un plebiscito, puede ser un referéndum o una encuesta.”

En ese repetido clima, decanos y consejeros se reunirán esta tarde, en la Facultad de Odontología, para definir los términos de la sesión de este jueves. Una de las ideas es que, si fracasa la reunión, esté organizado de antemano llevar el consejo hasta otro lugar, posiblemente a la Facultad de Ingeniería, desde las 11. ¿Qué pasará si, igualmente, el consejo no puede funcionar? El estatuto de la UBA fija que la asamblea es convocada por decisión del Consejo Superior o “a pedido de por lo menos un tercio de los componentes de la asamblea misma” (en total, son 236 representantes de profesores regulares, graduados empadronados y estudiantes). Por eso, según comentó ayer otro decano, entre hoy y mañana las autoridades de cada facultad comenzarán a recolectar las firmas de los asambleístas de sus respectivas unidades académicas. “En ese caso, los decanos le pediríamos al vicerrector que convoque la asamblea ad referéndum. Seguramente contaremos con el apoyo de más de un tercio de asambleístas que pide el estatuto.”

Para realizar el sexto llamado a la asamblea que debe elegir rector, todavía falta confirmar la sede. Como se sabe, los decanos solicitaron para el 15 de este mes la cesión de un espacio en el Congreso, donde creen que –por la diversidad de accesos y por el personal de seguridad del edificio– se dificultaría el boicot de la izquierda estudiantil. Y para hoy esperan una respuesta oficial. Las autoridades de la universidad daban casi por hecho ayer que el Gobierno les habilitará el Salón Azul de la Cámara baja. Pero, por razones organizativas, sería para el lunes 18. Si bien el estatuto de la UBA no lo especifica, por reglamento la asamblea debería hacerse en una sede de la universidad (de hecho, de los cinco intentos bloqueados este año por los estudiantes, cuatro fueron en el Nacional Buenos Aires y uno en la Facultad de Medicina). Ante las críticas por la eventual convocatoria en el Congreso, los decanos recuerdan, como antecedente, la elección del rector Risieri Frondizi, en 1957, realizada en el Teatro Cervantes, también en medio de protestas.