Gimnasia se impuso ayer 3-1 a Tigre en La Plata y profundizó la crisis del equipo que dirige Fabián Alegre. El conjunto de Victoria no gana desde la tercera fecha, se ubica penúltimo en la tabla de posiciones y se complica cada vez más en la tabla de los promedios. Sergio Araujo había puesto en ventaja al visitante tempranamente, pero Gimnasia lo dio vuelta con goles de Osvaldo Barsottini, Franco Mussis y Lucas Licht. Tigre terminó en inferioridad numérica, debido a que a los 20 minutos del segundo tiempo fue expulsado Marcos Gelabert.

Tigre había empezado mejor, más compenetrado, con ataques verticales y directos cada vez que se adueñaba de la pelota. Gimnasia intentaba ser el protagonista, pero estaba demasiado tibio en el pasaje inicial y sufría en cada contragolpe. La visita llegó con peligro a los 10 minutos de juego, mediante un potente remate de media distancia de Ariel Nahuelpán, que pasó apenas arriba del travesaño.

Pero diez minutos después, Gastón Díaz envió un pelotazo cruzado desde la derecha que Araujo conectó de zurda a la altura del segundo palo para marcar el 1-0. Sin embargo, el gol despabiló a Gimnasia, que empezó a jugar a otro ritmo y enseguida consiguió la igualdad. Mendoza ejecutó un tiro de esquina al medio del área, donde se elevó Barsottini para empatar. El local insistió, y diez minutos más tarde logró sacar provecho de otro corner. Alvaro Fernández lo lanzó, Barsottini peinó la pelota y Mussis convirtió el 2-1. En el complemento, Gimnasia aprovechó la desesperación de Tigre, llegó al tercer gol a través de un contraataque, en una definición con mucha categoría de Licht.