El golfista cordobés Angel Cabrera, ganador del Olimpia de Oro 2007, otorgado por el Círculo de Periodistas Deportivos, valoró las grandes condiciones del líder del circuito Tiger Woods, a quien definió como “excepcional y difícil de alcanzar”, pero consideró que mantiene esperanzas de hacerlo: “Habrá que estar atento, porque en algunas semanas del año se le puede escapar la tortuga”. El Pato, como se lo conoce en el mundo del golf, se mostró emocionado luego de recibir la distinción de mejor deportista argentino 2007, porque “es un orgullo inmenso recibir el reconocimiento al sacrificio y al esfuerzo que uno hace durante el año”.

Cabrera amplió su balance al conjunto de golfistas argentinos que consiguió buena figuración en distintos torneos internacionales, al decir que “se han logrado cosas importantísimas y de ahora en más este deporte va a crecer como se lo merece en el país”.

“Somos varios los que estamos en diferentes tours y que veníamos amagando hace rato, pero este año se nos dio, por suerte. Ahora espero que vengan muchos títulos más”, agregó Cabrera, quien definió al conjunto de argentinos como capaz de conseguir varios logros más “porque aún no se llegó al techo”.

En cuanto a su triunfo consagratorio en el Abierto de los Estados Unidos, Cabrera sostuvo que “en los primeros días no me daba cuenta del valor que tenía y después, cuando tomé conciencia, lo asumí con la responsabilidad de saber que iba a tener que seguir cumpliendo, que no podía quedarme en eso”.

“Las cosas se dan porque uno las provoca. Trabajé, hice las cosas bien y por eso hoy estoy donde estoy, algo que cuando empecé como caddie, a los 10 años, no imaginaba, porque ni siquiera pensaba en que podía llegar a ganar un torneo”, expresó Cabrera ya referido a su experiencia individual en 2007.

Respecto del ranking del mundo, sostuvo que en el golf “ser segundo es muy bueno porque hay un solo número uno, que va a ser muy difícil alcanzar. Pero es un ser humano y habrá que estar atento, ya que en algunas semanas del año puede escapársele la tortuga”. El año de Cabrera será difícil de olvidar luego de su gran impacto en Estados Unidos. Pero ahora el cordobés buscará ubicarse entre los líderes del ranking mundial, una tarea complicada, pero que Cabrera está dispuesto a lograr.