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Las ventas en supermercados volvieron a contraerse en octubre contra septiembre y se mantienen en niveles superiores al 30 por ciento en la comparación interanual, informó el Indec. La baja mensual del 2 por ciento rompe la tendencia a la “desaceleración de la caída” que tanto entusiasmó al equipo económico desde mediados de año y que había sido interpretada como una señal del fin de la recesión. A precios corrientes, en tanto, se registró una suba mensual del 3,7 por ciento. A pesar de la recesión, aumentar precios sigue siendo un buen negocio.
En lo que va del año, la facturación de los supermercados aumentó el 45,5 por ciento, pero las ventas medidas en cantidades físicas retrocedieron el 25,6 por ciento. Los supermercados venden menos y facturan más; la actividad continúa siendo rentable. Mientras tanto, una gran porción de los consumidores, aquellos con ingresos salariales, se ve compelida a restringir sus consumos. El ajuste se refleja en la composición de las ventas. Las más afectadas fueron las “menos necesarias”. Según las cifras finales de septiembre, las últimas desagregadas conocidas ayer, mientras a precios corrientes el rubro “alimentos y bebidas” aumentó, en términos interanuales el 23,2 por ciento (la inflación superó el 40 por ciento), los Artículos de Limpieza lo hicieron el 18,4, Indumentaria, Calzado y Textiles para el Hogar, el 21,9. Por último, los productos electrónicos mostraron una caída del 34,8 por ciento.
Para el titular del Indec, Juan Carlos del Bello, la caída de ventas de los supermercados respondió también a un traslado de la demanda hacia los comercios de menor tamaño. A esto habría contribuido la competitividad en los precios y la reaparición de la libreta en los negocios de barrio.
Ayer también se conocieron los resultados de las ventas en shoppings, las que se recuperaron el 1,7 por ciento respecto de septiembre y retrocedieron el 14,9 por ciento en la comparación interanual. En este caso, la leve recuperación fue explicada por el gasto del turismo favorecido por el tipo de cambio.