José Pícaro se levanta el sábado eufórico, después de una noche en la que casi no pudo dormir, a causa de la ansiedad por ver al equipo argentino salir a la cancha en su debut en el Mundial 2006. Almuerza liviano, para estar atento a las jugadas que sueña con seguir en detalle en un moderno plasma de 42 pulgadas, adquirido en 12 cuotas con su tarjeta de crédito. La hinchada familiar ya está ensayando los cantitos en el living, cuando llaman a la puerta. Son los inspectores de Santiago Montoya, con una orden de secuestro del preciado aparato hasta tanto José Pícaro, deudor de Rentas, no se ponga al día con sus impuestos.

Tal vez no ocurra este mismo sábado, pero una situación similar podría suceder en cualquier momento durante el mes del Mundial (suponiendo, claro, que la selección sorteara con éxito la primera ronda, porque en caso contrario lo más probable es que Pícaro le entregue voluntariamente a Montoya el plasma en parte de pago).

Según cifras preliminares, Rentas de la provincia de Buenos Aires ya identificó a 1430 contribuyentes bonaerenses que en el último mes adquirieron plasmas de TV en centros comerciales de primera línea. De ellos, 814 contribuyentes (el 57 por ciento) eran grandes morosos de Rentas. Con el siguiente detalle:

- En total, adeudan al fisco 31,7 millones de pesos, distribuidos casi por mitades entre el impuesto inmobiliario e ingresos brutos. No obstante, algunos también mantienen deudas por patentes (en total, 783 mil pesos) y hasta por el incumplimiento del impuesto a las embarcaciones deportivas (19 mil pesos).

- De la nómina, 240 son personas jurídicas (empresas), con una deuda total que asciende a 20,4 millones de pesos. Las otras 574 son personas físicas, que adeudan en conjunto 11,3 millones. O sea que cada una de estas personas deben a Rentas en promedio unos 19.600 pesos.

“Estos contribuyentes, que tienen 10.000 pesos para comprar un plasma pero no pagan los impuestos, ya fueron intimados y si no regularizan su situación se les podrá pedir el embargo del artefacto que compraron”, advierten desde la entidad recaudadora. El nuevo Código Fiscal de la provincia, aprobado por la Legislatura a fines del año pasado, habilita a Rentas a secuestrar mercadería sin invertención judicial, después de un proceso administrativo de carácter sumarísimo. Montoya, a su vez, sonríe en silencio cuando se le pregunta si los embargos empezarán en las próximas horas, en pleno Mundial, o si respetará la pasión futbolera de los morosos.

Como sea, en la mira de Rentas hay un universo de teleadictos mucho mayor. En el organismo estiman que, después de procesar los datos de venta anual de plasmas y LCD, habría unos 5500 contribuyentes radicados en la provincia que adquirieron estos productos en el último año. De cumplirse las tasas habituales de morosidad, unos 3600 podrían estar en situación irregular con el fisco.