El último episodio de la larga crisis del Indec empezó a quedar superado. Los trece trabajadores desplazados del organismo llegaron a un acuerdo con la Jefatura de Gabinete y el Ministerio de Economía para pasar a prestar funciones en esta última cartera, dentro del área de la Secretaría de Política Económica. De acuerdo con el organigrama del Estado, el Indec depende de esa repartición, aunque en la práctica responde a las órdenes del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. La comisión interna de ATE en el Instituto aprobó ayer en asamblea esa “solución transitoria” y desactivó la amenaza de medidas de fuerza.

Los trece empleados –cuatro del área que mide la pobreza y la indigencia y nueve de la oficina que releva la inflación– serán recontratados por un año en Economía. Es una alternativa que salva el conflicto y que deja las cosas empatadas en la interna entre Alberto Fernández y Miguel Peirano, por un lado, y Moreno, por el otro. El secretario de Comercio logró lo que se proponía, que esos empleados dejaran de trabajar en el Indec, mientras que el jefe de Gabinete y el titular de Hacienda consiguieron reubicar a los cesanteados y frenar otra ola de paros en el organismo.

Después de la asamblea de trabajadores, los representantes gremiales de ATE en el Indec acudieron a una reunión de la comisión mixta que comparten con Jefatura de Gabinete y Economía. Allí se terminó de cerrar el acuerdo. Por el ala oficial estuvieron el subsecretario de Coordinación Económica, Osvaldo Alonso, y el subsecretario de la Gestión Pública, Juan Manuel Abal Medina. En tanto, ATE estuvo representada por Leopoldo González, Daniel Fazio, Mario Sánchez Toranzo y Cynthia Pok.

La propuesta final de reincorporación es por un año. El acta suscripta incluye “la restitución de los vales alimentarios descontados en su momento”. Ese era otro de los reclamos básicos de los trabajadores, que venían denunciando la violación de un convenio que habían sellado con Alberto Fernández para levantar el paro de 45 días que hicieron hasta septiembre. ATE aclaró que “sin perjuicio de lo acordado, se interpreta como una solución transitoria hasta tanto se concrete la reinstalación en el Indec” de los trabajadores desplazados.

El conflicto se había desatado el lunes, cuando la conducción del organismo decidió no prorrogar los contratos de trece trabajadores. Algunos de los desplazados habían declarado en las causas judiciales en las que se investigan supuestas “manipulaciones” en la elaboración de los índices por parte de Moreno, Ana María Edwin, titular del Indec, y Beatriz Paglieri, interventora en el área de precios. Economía hizo saber en esa oportunidad que no estaba de acuerdo con la decisión de no renovar los contratos y que buscaría una solución. La salida finalmente fue que esos empleados pasaran a trabajar en la propia cartera económica.