El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, defendió ayer que los países de la región adopten un mecanismo similar al que Brasil mantiene con Argentina, para pagos en monedas locales de su intercambio comercial, y ya inició un diálogo con Colombia sobre el tema. Lula propuso formalmente a su homólogo colombiano, Alvaro Uribe, iniciar los estudios para la implementación de un acuerdo que permita el pago en monedas locales para el intercambio comercial.

Lula se comunicó telefónicamente con el presidente venezolano, Hugo Chávez, y le narró el interés de Uribe en la propuesta y aprovechó la oportunidad para sugerirle que Brasil y Venezuela inicien conversaciones sobre la cuestión. La propuesta lanzada por Lula a Uribe –así como el interés explícito de Chávez– manifiesta la disposición de los mandatarios de iniciar el largo camino de compatibilizar burocracias, pero también deja en evidencia una preocupación común: la dependencia del dólar en tiempos de alta volatilidad cambiaria. “Precisamos poner a nuestros ministros de Hacienda y presidentes de bancos centrales a dialogar y crear reglas para que no necesitemos seguir dependiendo del dólar, que está cada día más escaso y cada día más problemático”, dijo Lula al pronunciar un discurso ante Uribe. Incluso, anotó el presidente, la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) podría beneficiarse de eso. “Si conseguimos determinar en la Unasur, definitivamente, un intercambio comercial en moneda propia, estaremos librándonos de un gran problema”, indicó.

Para la especialista Lucía Maduro, del departamento económico de la Confederación Nacional de la Industria, la coyuntura de una crisis financiera global “torna interesantes alternativas como ésta, aunque requiere una enorme integración de los bancos centrales”. Posibilidades como la de realizar pagos en las monedas locales “tienen que ser exploradas”. Para Ricardo Martins, director del departamento económico de la Federación de Industrias del estado de San Pablo, por lo menos para el segmento industrial “ese mecanismo ha sido prácticamente inocuo con Argentina”.