En el mismo momento en que se agudiza la crisis en Europa por el conflicto en Grecia, España tuvo un dato positivo. En el primer trimestre del año, su PBI creció el 0,1 por ciento, después de 18 meses de contracción de la actividad. Según el Banco de España, esta recuperación fue posible a partir de “una mejora del consumo de los hogares”, que se dio por un incentivo estatal a la compra de autos. Además, las familias se apuraron a comprar bienes, ya que el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero está por aumentar el IVA, como parte de un “plan de austeridad”. En este sentido, la actual administración espera para este año una contracción de la actividad del 0,3 por ciento.