El periodista argentino Fernando Cola, quien fuera dado por desaparecido la noche del domingo en el sudeste de Bolivia, en medio de un enfrentamiento por tierras, fue encontrado ayer y está en un regimiento de la región, informó la embajada de Argentina. El ministro de Defensa, Walker San Miguel, comunicó la noticia al embajador argentino, Horacio Macedo.

Cola se encuentra “en un estado aparentemente bueno” en un regimiento militar de la localidad de Cuevo y será evacuado de la zona cuando las autoridades bolivianas lo dispongan. Por su parte, Leonardo Tamburini, también argentino y director del Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (Cejis), para donde trabaja Cola, comentó que, si bien efectivamente fue “ubicado”, su situación todavía es confusa. “No se sabe ni cuándo va a salir ni si está herido, ni la certeza de cuándo va a ser evacuado en el contexto de una situación que no está controlada”, dijo Tamburini.

Cola y su compañera de trabajo, la periodista boliviana Tanimbu Extremadoiro, quien se ha comunicado con el Cejis, acompañaban una comitiva gubernamental que intentó ingresar en una zona bloqueada por hacendados y pobladores que resisten una revisión de sus títulos sobre la tierra. Cola y Extremadoiro realizan un documental para el Cejis y la Organización No Gubernamental (ONG) danesa Grupo Internacional de Trabajo con Pueblos Indígenas acerca del conflicto de tierras en esa zona, donde el gobierno denuncia la existencia de siervos y esclavos guaraníes. Según el gobierno, el número de desaparecidos en la tarde de ayer eran siete, después de que las primeras versiones señalaron que eran once, incluidos los dos periodistas.

El viceministro de Tierras, Alejandro Almaraz, explicó que una brigada móvil del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) e indígenas guaraníes sufrieron una emboscada, por lo que no pudieron llegar a la asamblea de las 26 capitanías de la Asamblea del Pueblo Guaraní en la comunidad de Itakuatía, en pleno Chaco boliviano.

Además, unas 53 personas, entre ellas muchos guaraníes, resultaron heridas, algunas de gravedad, y se encuentran actualmente internados en el hospital de Camirien. El gobierno dijo que esto fue el resultado de una “emboscada” de parte de los hacendados y grupos de choque autonomistas del departamento de Santa Cruz de la Sierra que se oponen a la reforma agraria en el lugar y se niegan al control de sus tierras por el gobierno.