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Según fuentes del tabloide sensacionalista británico The Daily Mirror, el derrocado presidente iraquí Saddam Hussein habría padecido un ataque cerebral menor y podría morir ante de comparecer ante el tribunal iraquí liderado por Salem Chalabi. El abogado jordano que defiende al ex presidente iraquí, Jordano Mahammed Al Rashdan, mandó una carta a Chalabi, en la que le pide que Hussein sea sometido a una urgente revisación médica. Sus manos estarían heridas por el impacto de algún arma de fuego, supuestamente disparada cuando fue capturado, y su estado de salud sería muy malo. El matutino informa que Hussein quiere reunirse con el equipo internacional de abogados que lo patrocinan porque “teme morir en las próximas semanas”. “Saddam está en muy malas condiciones de salud. Según el Comité Internacional de la Cruz Roja, nuestro cliente sufrió un pequeño ataque cerebral y los últimos estudios indican que hubo heridas. Creemos que podría morir de estos problemas”, sostiene la misiva. Además, los abogados se quejan de que su acceso a Hussein está fuertemente restringido, lo que vulnera los derechos garantizados por la Convención de Ginebra. A diferencia de la Cruz Roja, que había considerado la salud de Saddam como “buena”, Al Rashdan dijo que “se está deteriorando rápidamente y tal vez no llegue con vida a un juicio”. La táctica se parece a las excusas de demencia menor interpuestas por la defensa del ex dictador chileno Augusto Pinochet para evitar que sea sometido a juicio.