EL MUNDO › EL ANTIGUO PARLAMENTO DE KIRGUIZTAN DEJA SUS FUNCIONES
Camino institucional entre tulipanes
El nuevo Legislativo salido de los polémicos comicios eligió de presidente a uno de los líderes de la “revolución de los tulipanes”.
Por Rodrigo Fernández*
Desde Bishkek
La confusión que reinaba en la política de Kirguiztán debido a la coexistencia de tres cámaras que se reclamaban legítimas fue resuelta definitivamente ayer con la autodisolución de la Asamblea de Representantes del Pueblo y de la Legislativa, que formaban el antiguo Parlamento bicameral. Al mismo tiempo, el nuevo Legislativo salido de las polémicas elecciones de febrero y marzo –cuyos resultados desencadenaron la revuelta que acabó con los 14 años de poder de Askar Akayev– se reunía y elegía como presidente a uno de los líderes de la revolución.
Kurmanbek Bakiyev, que había sido designado primer ministro por el antiguo Parlamento, compareció ayer ante la nueva cámara y se sometió al voto de ésta. El temor expresado por algunos políticos de que ocurriera una contrarrevolución legal y que Bakiyev fuera rechazado por los nuevos diputados no se convirtió en realidad: 54 de los 56 legisladores presentes en la cámara de 75 escaños confirmaron al líder del Movimiento Popular como jefe del gobierno. Con ello se lograba que la política kirguiza regresara a los marcos legales. La comparecencia de Bakiyev ante el nuevo Parlamento y el reconocimiento mutuo efectuado ayer prueba para algunos observadores que no hay división entre el primer ministro y Félix Kulov, coordinador de las fuerzas del orden y la seguridad que el día anterior había apoyado la legitimidad de los nuevos diputados.
No todo está aclarado, sin embargo. Una de las incertidumbres es cuándo se celebrarán las próximas presidenciales. Tekebayev, el flamante jefe del Parlamento, señaló que sólo se podrá fijar la fecha de los comicios una vez que Akayev presente su dimisión, ya que formalmente sigue siendo presidente. Por ello, propuso crear una comisión con miembros del gobierno y de la nueva y las viejas cámaras para tratar de entrar en contacto con el ex líder kirguizo e intentar persuadirlo de que dimita. Sólo si fracasan en su misión, “habrá que tomar una decisión anticonstitucional” –es decir, convocar a comicios presidenciales– en aras de la estabilización del país.
Sin embargo, Tuigunal Abdraimov, que encabeza la Comisión Electoral Central, considera legítima la decisión del antiguo Parlamento de celebrar las elecciones el 26 de junio próximo. “Será muy difícil organizarlas y no está resuelto el problema de su financiación, pero tanto la convocatoria a los comicios como la fecha de su realización son totalmente legales”, opina. Marcus Muller, jefe del Centro de la OSCE en Bishkek, manifestó el día anterior que podría ser contraproducente celebrar las presidenciales en junio, ya que quedaba poco tiempo para que las fuerzas políticas lleguen a los compromisos que son necesarios en esta situación y calmen al pueblo.
Por el momento sólo Bakiyev, de 55 años, ha anunciado sus intenciones de presentarse a esos comicios. Es probable que también lo haga Kulov, de 57 años; los detractores de Akayev aseguran que éste ordenó encarcelarlo precisamente después de que hiciera públicas sus ambiciones presidenciales. Otro probable candidato es Tekebayev, que fue el rival de Akayev en el 2000. Líder del movimiento Atá-Mekén, tiene la misma edad de Kulov y se define como social-demócrata, y, como Bakiyev, proviene de Jalalabad.
El acuerdo de reconocer al nuevo Parlamento fue recibido como una traición por muchos de los que el jueves tomaron la sede del gobierno y forzaron la huida de Akayev. Ayer unos 300 hombres se congregaron a las puertas del Legislativo y formaron el Comité 27 de Marzo, que dicen reúne a 40 organizaciones. Exigen la disolución de la nueva cámara, elecciones limpias, la dimisión de los actuales dirigentes “contrarrevolucionarios”, y el regreso a la Constitución de 1993. Amenazan con formar hoy un cordón alrededor del Parlamento para impedir que los diputados puedan sesionar.Tekebayev, que salió a informar de los resultatos de la sesión, fue abucheado y tuvo que retirarse a los gritos de “ketsín, ketsín” (vete, vete).
*De El País de Madrid. Especial para Página/12.