Tabaré Vázquez afirmó ayer que los mandos militares de la dictadura no están amparados en la Ley de Caducidad y reiteró que no piensa derogar esa ley. “Vamos a seguir investigando todo el tiempo que sea necesario para tratar de encontrar más restos de ciudadanos desaparecidos”, prometió ayer el presidente uruguayo. Las definiciones de Vázquez llegaron en medio de un debate en la izquierda uruguaya sobre la derogación de la Ley de Caducidad. El secretario de Derechos Humanos de la principal central sindical uruguaya PIT-CNT, Raúl Olivera, rechazó la decisión del presidente de respetar esa ley. “El gobierno representa a la izquierda que no quiere ir contra una ley que fue ratificada por un referéndum, por la decisión del pueblo. Sin embargo, la Constitución también fue ratificada por un referendo y de vez en cuando es modificada”, explicó a Página/12 Olivera.

En una entrevista con la radio uruguaya AM Libre, Vázquez aseguró ayer que en el último congreso del Frente Amplio (FA), tres años atrás, se decidió respetar la Ley de Caducidad, aunque avanzando en la investigación de los crímenes que quedaban por fuera de ella –el robo de niños y las desapariciones y asesinatos que ocurrieron en el exterior–. Durante la entrevista, la primera en meses en la que toca el tema de derechos humanos en profundidad, el presidente hizo un repaso de los logros alcanzados hasta ahora. Destacó el hallazgo, a fines del año pasado, de los cuerpos de militantes asesinados por la dictadura. Vázquez, sin embargo, reconoció que queda mucho por hacer. “Otros seres aún no han podido ser encontrados y hablo de María Claudia”, dijo en alusión a María Claudia García, la nuera del poeta argentino Juan Gelman. “Tenemos que investigar y abrirle el paso a la Justicia, la que dirá cuándo se debe aplicar o no la ley y en ese sentido estamos trabajando”, afirmó el mandatario, una semana después de que el ex dictador Gregorio Alvarez tuviera que declarar por primera vez.

Olivera, en cambio, rescató otra resolución de ese congreso. “En 2003, el Frente Amplio votó por adecuar la ley interna al derecho internacional”, aseguró. Recordó, además, que la ONU y la OEA condenaron la amnistía uruguaya. La suya no fue la única voz que se alzó contra la Ley de Caducidad. Semanas atrás, el senador Rafael Michelini había declarado a la prensa que iba a luchar por terminar con la amnistía. Además de Nuevo Espacio, el partido de Michelini, otras fuerzas del FA como el Partido Comunista, el Partido de la Victoria del Pueblo, el Movimiento 26 de Marzo y la Corriente de Izquierda, reclaman el fin de la amnistía. Pero las críticas más fuertes provienen de la central obrera a la que pertenece Olivera.

La PIT-CNT lanzó el lunes pasado una campaña nacional para concientizar a la ciudadanía sobre la necesidad de derogar esta amnistía. La idea es recorrer el país para explicar la postura de la central, y de todas las organizaciones de derechos humanos, sobre la Ley de Caducidad. Esta amnistía ampara todos los crímenes cometidos por militares, policías y civiles que cumplieron órdenes durante la dictadura, en la que desaparecieron 164 uruguayos. Olivera reconoció que el gobierno ha marcado un cambio positivo en la defensa de los derechos humanos. Sin embargo, criticó la estrategia actual de continuar avanzando en los espacios que deja libre la Ley de Caducidad.

El caso Gelman marcó el momento de mayor tensión entre el gobierno nacional y los mandos militares. El presidente había anunciado en agosto pasado que los comandantes en jefe le habían dado la ubicación del cuerpo de la nuera de Gelman. La noticia acaparó toda la atención mediática nacional e incluso la de algunos países vecinos. El mandatario oriental había calificado el supuesto hallazgo como “un hecho histórico”, pero todo terminó en un fiasco cuando los restos de García no fueron encontrados por el equipo internacional de antropólogos forenses especialmente convocados para la ocasión. Entonces el presidente, que había agradecido días atrás a los jefes militares por su adhesión y respeto a la Constitución, decidió dar un paso atrás y esperar a que el tema se enfriara. Casi diez meses después, Vázquez retomó un tema sensible para intentar darle un cierre a un debate que desgasta al FA.

Informe: Laura Carpineta.