ESTADOS UNIDOS.

La foto de Bush y Sarko

George Bush y Nicolas Sarkozy no disimularon su empatía ayer. El presidente francés reconoció que existen diferencias actualmente, pero prefirió destacar los buenos tiempos pasados. “Cuando miramos, sobre la costa del Atlántico, todos los cementerios con cruces blancas, ésos son los jóvenes estadounidenses que llegaron a morir por nosotros”, recordó el mandatario, quien no fue acompañado de su esposa, Cecilia, que estaba enferma. El matrimonio Bush, en cambio, estaba completo. Es la segunda vez que el presidente estadounidense elige la residencia de sus padres para recibir a mandatarios. La última vez fue con el presidente ruso Vladimir Putin. Sin embargo, la reunión con Sarkozy fue muy diferente. Bush calificó al nuevo presidente francés como su aliado y aseguró que discutió temas como Irak y Sudán. Washington, que durante el gobierno de Jacques Chirac no mantuvo una buena relación con París, espera poder revertir esa situación con el nuevo gobierno y sumar su apoyo para su política en Medio Oriente y Africa.

El primer ministro polaco, Jaroslaw Kaczynski, puso fin ayer a varios días de suspenso al anunciar elecciones legislativas anticipadas probablemente para el próximo 21 de octubre. El mandatario intentó buscar una salida a la inestabilidad gubernamental que acosa a su gobierno desde hace dos años. “Ya no veo posibilidad alguna en estos momentos de mantener un gobierno minoritario, y ya no queremos hacer que dure el gobierno que tuvimos en estos últimos meses”, explicó el premier y hermano gemelo del presidente, Lech Kaczynski. En abril de 2006, el primer ministro había construido una alianza junto con los populistas de Autodefensa y de la extrema derecha ultracatólica de la Liga de las Familias Polacas. Sin embargo, en los últimos tiempos las luchas internas fueron creciendo hasta que Kaczynski decidiera sacar del gabinete al líder de Autodefensa y su ministro de Agricultura, quien semanas después forzó a que su fuerza abandonara la coalición. Casi sin aliados, el premier llegará a la elección de octubre en una situación muy débil.