La misión de mantenimiento de paz de la ONU en el Líbano parecía estar en un delicado equilibrio ayer cuando Italia, presionada, se ofreció a comandarla, después de que Francia dijera que sólo enviaría 200 tropas. En una conferencia de prensa en Washington, George Bush dijo: “Ahora la comunidad internacional debe designar el liderazgo de esta fuerza internacional y darle reglas consistentes de intervención”. Además, instó a que la fuerza se desplegara “lo antes posible para mantener la paz”.

Bush aseguró ayer que espera que Francia mejore la oferta. Como patrocinadores conjuntos de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad, que logró el cese del fuego el 11 de agosto pasado, se esperaba que Francia comandara la misión. Washington, el copatrocinador, no envía tropas, sino que ofrece apoyo logístico, inteligencia y comunicaciones. Esto se completa con 230 millones de dólares para la reconstrucción, que se suman a los 50 millones ya destinados en concepto de ayuda humanitaria urgente. Los diplomáticos europeos se reúnen en Bruselas mañana para discutir la cantidad de soldados que las 25 naciones miembros aportarán para la misión ampliada de la ONU en el sur del Líbano. La ONU espera tener a 3500 soldados el fin de semana que viene, de un total de 15 mil. Por ahora las únicas naciones que ofrecieron mandar tropas son Indonesia, Bangladesh, Nepal y Malasia. Olmert se opone a su participación ya que estos países no tienen relaciones diplomáticas con Israel.

Pero el presidente francés, Jacques Chirac, y la canciller alemana Angela Merkel discutirán el tema más profundamente el viernes –por lo que probablemente no se avance mucho en la reunión de Bruselas–. En lo que fue visto como un desaire a Francia, el premier israelí, Ehud Olmert, llamó por teléfono el domingo a su par italiano, Romano Prodi, para pedirle que Italia liderara la misión. También le expresó que esperaba que las tropas monitorearan la frontera libanesa-siria para evitar un rearme de Hezbolá. Francia dijo que por ahora nada está decidido. Fuentes de la Cancillería italiana indicaron que el gobierno está dispuesto a tomar las riendas. Roma ha estado hablando de la misión durante semanas, ofreciendo enviar hasta tres mil tropas –más que cualquier otro país–.

La misión ha sido promocionada como una importante oportunidad para que Italia demuestre su compromiso con la paz y la seguridad en Medio Oriente. Italia estuvo marginada dentro de Europa durante los años de Berlusconi, en parte por su alianza con Washington y Prodi busca cambiar esto. Sin embargo, dentro del gobierno de Prodi las voces llaman a la cautela.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.

Traducción: Celita Doyhambéhère.